Familiares de Gabriel Horacio Franco (39), quien el pasado 30 de octubre fue condenado a 14 años de prisión por hechos de violación, reclamaron ayer su libertad frente a los Tribunales de Villa María.
Portando carteles con inscripciones alusivas y haciendo sonar bombos y redoblantes, los manifestantes se ubicaron sobre la vereda del Palacio de Justicia, donde expresaron su oposición a la dura pena impuesta por el juez René Gandarillas, que lo declaró culpable de haber abusado sexualmente de las hijas y una hermana de la esposa de Franco.
Una veintena de personas, entre las que se encontraban la mujer, los hermanos y los hijos del condenado, insistieron en su inocencia y se quejaron porque el juez Gandarillas “nunca nos recibió para darnos una explicación”.
“Queremos que nos digan el porqué de la condena”, reclamó enfáticamente Cristian Franco, hermano de Gabriel, y agregó: “Hemos venido en varias oportunidades, durante dos semanas, pero no nos recibió”.
Los familiares aseguran que Franco es inocente y que fue víctima de una serie de mentiras urdidas por las tres jóvenes que, a fines de 2011, lo acusaron de haberlas sometido a sus bajos instintos por espacio de 13 años.
La pacífica manifestación fue atentamente seguida por un grupo de efectivos policiales que se apostaron en las puertas de acceso a la sede judicial.
Cabe recordar que al cabo del juicio, que demandó siete audiencias de debate, Franco fue declarado autor responsable de “corrupción de menores agravada y continuada”, “abuso sexual gravemente ultrajante”, “abuso sexual con acceso carnal” y “tentativa de abuso sexual con acceso carnal” por hechos que se produjeron entre 1996 y 2009, cuando las víctimas tenían entre 5 y 18 años de edad.