El camarista René Gandarillas le impuso ayer una pena de ocho años de prisión de cumplimiento efectivo a Andrés Aníbal Sarmiento (30), un vecino de barrio San Nicolás que compareció en juicio oral y privado, acusado de violar a una menor.
Sarmiento, alias “Anchoa” y con último domicilio en Agustín Tosco y Buenos Aires, fue declarado autor responsable de “abuso sexual con acceso carnal” por un hecho ocurrido en enero de 2012 y que cuatro meses después lo dejó tras las rejas.
En la tercera y última audiencia de debate, y al momento de pronunciar su alegato, el fiscal de la Cámara del Crimen, Francisco Márquez, solicitó una condena de nueve años de cárcel para Sarmiento, pedido al que adhirió la asesora letrada Ana María Díaz (representante legal de la víctima), mientras que el abogado defensor, el bellvillense Francisco Lavisse, reclamó la absolución y la inmediata libertad de su cliente.
Cabe señalar que las partes formularon sus conclusiones en el marco de una audiencia que se realizó a puertas cerradas, tal como se había desarrollado todo el proceso, y sólo la lectura de la parte resolutiva de la sentencia se hizo en audiencia pública.
El juicio comenzó el lunes de la semana pasada, oportunidad en la que, luego de leerse la pieza acusatoria, Sarmiento se abstuvo de declarar. Al día siguiente se receptaron sólo tres testimonios y, con acuerdo de las partes, se incorporó por lectura toda la prueba obrante en el expediente, lo cual aceleró los tiempos procesales.
En principio, el juicio iba a concluir el viernes 6, pero el abogado defensor debió atender una causa que se tramita en la ciudad de Córdoba, por lo que aquella audiencia final se pospuso para el martes. Y luego, una nueva suspensión llevó la definición de la causa hasta la jornada de ayer.
Una vez finalizada la audiencia, Lavisse expresó su disconformidad con el fallo condenatorio y adelantó que posiblemente presente un recurso de casación, aunque para ello deberá esperar que se difundan los fundamentos de la sentencia.
Ahora bien, si el veredicto queda firme, Sarmiento deberá completar las dos terceras partes de la condena impuesta (es decir, cinco años y cuatro meses) para poder solicitar la “libertad condicional”.
De ese modo, el disoluto individuo estará en la cárcel hasta -por lo menos- septiembre de 2017 y recién entonces podrá requerir el citado beneficio, sin que ello signifique que se la vaya a otorgar sin más trámite.
Por el contrario, y teniendo en cuenta las características del hecho, todo parece indicar que no le será fácil a Sarmiento obtener la excarcelación en la fecha indicada, sobre todo porque la Justicia de Ejecución Penal es muy estricta cuando se trata de convictos que cometieron abusos sexuales.
