Con una producción digna de un espectáculo de primer nivel se llevaron a cabo las dos últimas muestras de Danza Vida en el Teatro Verdi.
El sábado 14, bajo el título de “¡Divas!”, la escuela presentó 19 cuadros en los que se mostraron las disciplinas técnicas: clásico, jazz, tap, contemporáneo, afro, street dance y acrobacia.
Las coreografías, creadas por la directora de la escuela, Andrea Valfré, y los profesores Miguel El Rassi y Cristian Rueskorosky, hicieron un recorrido por temas musicales de divas de la canción.
La gala tuvo también la participación de las cantantes Fernanda Quintás y Silvia Muñoz, más la de Abril Soria, alumna de la escuela.
“Por los comentarios de gente ajena a los bailarines, que fue a ver la función, creo que la muestra cobró calidad de espectáculo por la entrega de los alumnos en el escenario y por el trabajo de producción”, consideró Valfré.
“La muestra del 14 tuvo otra calidad coreográfica y otro despliegue porque se trataba de disciplinas técnicas, y esto hizo que se viera como un espectáculo, que es a lo que apuntamos nosotros, porque queremos brindarle al espectador algo más que una muestra de alumnos”, añadió.
Un cuento de muñecas
El sábado 7, los grupos de babies, infantiles y preadolescentes interpretaron 15 cuadros en medio del relato de un cuento.
El disparador de la muestra fue una pregunta con la que Valfré trabajó durante el año con los grupos de distintas edades y que además le dio el nombre a la gala: ¿Por qué bailamos?
Lo elaborado por las pequeñas originaron un cuento en el que una niña le pide a su tío, fabricante de juguetes, que le fabrique una colección de muñecas bailarinas. Cuando el mayor pregunta por qué las muñecas deben ser bailarinas, las respuestas dadas por las niñas a lo largo del año actúan como hilo conductor del espectáculo, intercalándose con los cuadros de danza.
Estas respuestas también fueron utilizadas para las gráficas de la muestra. Las coreografías en este caso fueron creación de la propia Valfré, Florencia Tissera y las profesoras auxiliares Mariana Valls y Agostina Martos.
En ambas funciones, así como había sucedido con la muestra del 30 de noviembre, el elenco de Danza Vida fue el encargado de darle un cierre a la noche con un tributo a Queen. Fueron 15 minutos que le pusieron el broche de oro a los ya muy elevados nivel y calidad de las puestas.
La iluminación, que incorporó 20 robóticas sobre el escenario, estuvo a cargo de una empresa de Córdoba, el sonido corrió por cuenta de Luis López y la musicalización fue de Marcelo Aranda.
La directora de la academia aseguró que lo que se vio sobre el escenario en las tres galas fue el producto de un trabajo en equipo entre profesores y Nicolás Mujica, su esposo, quien se encargó de la producción técnica.
