En los últimos años, cada vez se reportan más casos de picaduras de alacranes. Las provincias con tasas más elevadas de notificación de accidentes son Catamarca, Tucumán, Jujuy, Santiago del Estero y Córdoba.
Así lo informó la Universidad Nacional de Córdoba, en su revista institucional.
En Córdoba, el problema no es exclusivo de la Capital, sino que se ha extendido a otras ciudades como la nuestra, Cruz del Eje, San Francisco, Balnearia, Jesús María y Río Cuarto, entre otras.
Los alacranes están presentes en cualquier tipo de vivienda: en barrios humildes, en countries y en edificios en altura.
También incide la edad del barrio. Las casas viejas son más proclives a tener mayores incidentes de escorpionismo por los sistemas de desagües rotos o los pozos negros. Otra situación que favorece la aparición de alacranes son las grandes refacciones en las casas y los grandes movimientos de tierra suelen ocasionar que aparezcan en domicilios vecinos. Este es un factor de dispersión.
Según se informó ayer en el Hospital Pasteur de nuestra ciudad, el pasado fin de semana se atendieron a cinco pacientes con picaduras de alacranes, aunque de ejemplares no peligrosos.
De las más de 20 especies que viven en la provincia de Córdoba, sólo una peligrosa ha invadido la zona urbana: el tityus trivittatus.
Pueden reproducirse partogenéticamente, esto significa que la misma hembra puede producir células sexuales que no necesitan ser fecundadas. En condiciones extremas, esta hembra puede reproducirse sin macho.
La creencia de que siempre andan de a pares es incorrecta. Son animales solitarios, pero si en una vivienda se encuentra un ejemplar es probable que haya otros más.
El veneno le sirve como defensa y para obtener su alimento (capta a su presa clavándole el aguijón que lleva en la punta de la cola).
En la ciudad, dado que se encuentran mayormente en los desagües, no tiene predadores naturales, como pájaros o lagartijas.
En respuesta a este problema, el Centro de Zoología Aplicada de la UNC provee casi la totalidad de la materia prima que necesita el país.
Una de las especies más comunes es el bothriurus bonariensis (foto derecha) y otra es la tityus trivittatus. Esta última es la peligrosa.
El bothriurus tiene cola con un único aguijón, mientras que el otro presenta cola con aguijón y púa con doble aguijón.
Otras características de la especie inofensiva son las pinzas redondeadas y cortas. Tiene el dorso de coloración homogénea, es común en el campo. Su picadura no es peligrosa. Sólo produce efectos locales.
En cambio, el tityus ofrece un dorso con tres rayas más oscuras, es común en las ciudades, tiene pinzas finas y alargadas, su veneno es neurotóxico. Produce dolores intensos y edema en la zona de la picadura. Puede ser grave en niños y ancianos.