Siempre para Navidad y Año Nuevo, a raíz de la mayor ingesta de comidas y de bebidas, crecen los casos de gastroenteritis. Sin embargo, en el marco de esta Nochebuena hubo algo extra: los cortes de energía eléctrica. Y estos habrían ocasionado un adelantamiento de los cuadros de la enfermedad.
Así se desprende de lo que señaló ayer la médica Mariana Damia a EL DIARIO. La profesional estuvo de guardia en el Hospital Regional Pasteur durante el 24 y las primeras horas del 25 y constató una mayor cantidad de casos.
“No tengo números exactos para darle porque ya me retiré de la guardia, pero se pudo observar una mayor cantidad de casos en comparación con años anteriores previo a la Nochebuena”, dijo la facultativa ante la consulta de este matutino, en la tarde de la víspera.
Precisó que esta circunstancia suele aparecer “después de las fiestas”, justamente por las cenas.
Sin embargo, en la tarde del 24 ya se notó. “Inusualmente, se adelantó y ayer ya tuvimos muchos casos”, manifestó en alusión al martes.
Damia dijo que se trataba de casos leves, ninguno de gravedad y lo vinculó tanto a las altas temperaturas reinantes en estos días, por la ola de calor que golpea a la Argentina como también a la falta de energía eléctrica, ante los sucesivos cortes que padecieron diversos sectores de Villa María.
Ante la pregunta, la facultativa aseguró que afectó a todos los grupos etarios.
Entre las recomendaciones, sugirió no acumular comida en la heladera. “Evitemos cocinar mucho para no guardar lo que sobra”, graficó.
Apuntó la importancia de no ingerir alimentos del día anterior y hervir el agua en caso de quienes no poseen agua potable.
