El músico, ilustrador y diseñador gráfico villamariense Fernando Ormeño visitó días atrás la calle que lleva el nombre de su padre, “Maestro Nicolás Ormeño”.
El artista radicado en Córdoba posó debajo del nomenclador que homenajea al docente fallecido dos años atrás, reconocido como uno de los impulsores de la escuela nocturna, quien se desempeñara como director de una de ellas, la Ricardo Rojas, la cual funcionaba en la escuela Nicolás Avellaneda. Además, fue funcionario público municipal, oficiando como titular de Centros Vecinales durante la segunda gestión (1991-1995) del exintendente Veglia.
La calle, situada en el barrio Parque Norte, fue nombrada a fines del año pasado junto a la arteria que recuerda a Norma Ninina Tais de Arpón. “La calle de mi viejo se cruza con la denominada Jorge Luis Borges, autor a quien admiraba y me hacía leer a mí”, recordó Fernando, quien en su juventud interviniera como ilustrador del extinto suplemento “Humor a diario” de nuestro medio gráfico.