Diez personas perdieron la vida en abril de 2013, como saldo del tránsito violento y accidental. La misma cantidad falleció durante los dos primeros dos meses del año que pasó. La cifra de muertos se reiteró a lo largo del último cuatrimestre. Pero el período más infausto fue agosto: se registraron 12 fallecimientos por la causa que nos ocupa
Todos los episodios violentos son lamentables, pero más aún cuando después de sucedidos sobreviene una estela de vacío y desolación.
Y el año pasado, en consonancia con lo que ocurre en la provincia y en el país, el dolor embargó a decenas de familias, la mayoría, de estas latitudes.
El año transcurrió con muchos accidentes de tránsito en ambas “Villas” y, sin darnos respiro, se cobró la vida de 49 personas; cifra que, desde el frío análisis estadístico, permite inferir que antes de que se completara un lapso de ocho días, un viajero, uno “de los nuestros”, se convirtió en una nueva estrella blanca en el firmamento… en una estrella amarilla sobre el pavimento.
Todos los meses, unos más, otros menos, hubo que guardar un minuto de silencio y abrazar a familias enteras sumidas en el desconsuelo.
Así arrancamos el tórrido enero con seis lágrimas, por los seis que se fueron en aquellos cruentos episodios.
Y así llegamos al umbral del año nuevo con 48 víctimas fatales por accidentes de tránsito, pero que finalmente fueron 49, por un joven de 19 años que, tras dos semanas de agonía, falleció el reciente 2 de enero.
Abril y agosto fueron los más funestos: durante el mes de otoño (cuando se registró la mayor cantidad de accidentes viales) se produjeron 10 decesos a causa de las colisiones; en agosto, a su vez, hubo que pintar otras 12 estrellas amarillas. En sólo dos meses, casi la mitad de los muertos de todo un año.
La situación se agrava, claro está, si se hubieran incluido las víctimas fatales que provocaron los choques y vuelcos ocurridos en toda la región, pero que, como se dio cuenta en la página anterior, en este caso se ha delimitado el objeto de estudio en los acontecimientos violentos ocurridos en tránsito durante el año pasado en Villa María y Villa Nueva.
El primer accidente fatal del año pasado ocurrió durante las
primeras horas de la mañana del lunes 7 de enero, sobre la ruta nacional 158. Ese día perdió la vida un
hombre de Chaco en una múltiple colisión entre dos camiones y un auto.
La última tragedia en el camino se produjo
durante la madrugada del jueves 19 de diciembre sobre la exruta de
tránsito pesado cuando un muchacho de 19 años, quedó mortalmente herido al impactar el auto que ocupaba contra un poste de alumbrado. Murió 14 días después (el 2 de enero pasado).