Las motos - Protagonistas de choques y caídas

 

La reiteración y contundencia de algunos indicadores marcan una tendencia a la que hay que prestar atención. 

¿Debemos naturalizar las situaciones y dejar que “fluyan” por rutinarias que parezcan o tenemos que hacernos cargo de los episodios que nos golpean día tras día para procurar alcanzar una solución?

Esta apelación guarda relación con los datos que se exponen en esta tercera entrega sobre los accidentes de tránsito en Villa María y Villa Nueva durante el año 2013.

Y es aquí donde la gravedad de la situación comienza a vislumbrarse, cuando las principales conclusiones dan cuenta que las colisiones (sobre todo entre autos y motos) fueron los siniestros más recurrentes en la crónica diaria y que, de los dos vehículos mencionados, el último resultó ser el medio de locomoción más involucrado en los episodios, a la vez que, como consecuencia, quienes lo condujeron fueron los más expuestos a riesgos.

Las motos, los autos, las bicicletas, las pick-ups, los camiones, otros medios que rodaron por calles y caminos y  los peatones se repartieron el protagonismo en los accidentes ocurridos en las dos ciudades durante el año que se fue.

Tal vez sea un punto de partida si comenzamos a pensar que se trata de vehículos a los que recurrimos para poder llegar y no para quedarnos en el camino; son medios que nos permiten acercarnos a los demás y no quedarnos lejos.

Por eso, el tema de hoy se circunscribe a los vehículos que se vieron involucrados en los accidentes de tránsito y, correlativamente, los tipos de siniestros que se registraron entre enero y diciembre del año que convivimos.

 

Tres tipos de vehículos (motos, autos y pick-ups/utilitarios) concentraron durante 2013 la mayor participación en los accidentes de tránsito con heridos en las calles y accesos de Villa María y Villa Nueva.

 

La conclusión expuesta surgió de la recolección, organización y análisis de los datos realizados por EL DIARIO, a partir de la información proporcionada durante el año pasado por la Policía y los Bomberos Voluntarios. 

En menor medida, también se observó la concurrencia en las colisiones, vuelcos y caídas de otros rodados, entre ellos bicicletas, camiones, ómnibus, cuatriciclos, trenes y, en ínfima medida, una máquina agrícola y un vehículo de tracción a sangre.

En total, la materia prima que insumieron los 1.010 accidentes con lesionados alcanzó la cifra de 1.725 medios de movilidad, lo que representa casi el 7% del parque rodante que poseen las familias residentes en una y otra ciudad.

Las motos

No es objetivo de este informe de investigación, de estilo periodístico, comprobar o rechazar hipótesis, muy presentes en el comentario popular, acerca de la calidad conductiva de los motociclistas que circulan por nuestras calles, sino explorar y describir, como aporte para un ineludible diagnóstico que se deberá hacer, la concurrencia de este tipo de rodados (las motos) en los episodios viales (choques y caídas) que han generado daños personales.

El estudio permitió establecer que en los accidentes registrados durante 2013 intervinieron 847 motos -lo que representa el 49,27% del total de vehículos siniestrados en los dos cuadros urbanos que comprende el campo de estudio- y el punto más álgido ocurrió durante el mes de abril, cuando 93 motos se sumaron a la interminable serie de colisiones y caídas.

Estas cifras dan cuenta que la moto tuvo la mayor magnitud participativa entre todos los vehículos involucrados, al punto que no es erróneo afirmar que cada tres días, chocaron no menos de siete de estos rodados.

Asimismo, se ha podido determinar que el mayor número de tipos de motos participantes en estos hechos corresponde a las múltiples versiones de 110 centímetros cúbicos que se comercializan en la actualidad, como lo marcan las 554 presentes, es decir, el 65,40% de los vehículos de dos ruedas motorizados siniestrados.

En orden decreciente, también fueron parte de los accidentes viales 99 motos de 125 centímetros cúbicos, 96 de 150 de potencia, 37 rodados de entre 200 y 250 centímetros cúbicos, 10 unidades de alta cilindrada y 51 vehículos con una potencia menor a los 110, como fue el caso de los ciclomotores.

Los autos

El segundo lugar correspondió a los autos, en todos sus modelos, con 580 unidades accidentadas, lo que equivale al 33,04% del total de móviles involucrados.

En la mayoría de los casos donde se produjeron impactos entre dos vehículos, sobresalieron las colisiones entre un auto y una moto (381 oportunidades).

De acuerdo a los registros mensuales, la participación de los autos osciló entre las 36 unidades concurrentes durante septiembre y los 69 automotores presentes durante abril.

Pick-ups y utilitarios

En un escalón más abajo, aparecen los 173 vehículos encuadrados como utilitarios (por ejemplo, furgones) y camionetas, con o sin tracción integral, es decir, el 10,05% de todos los móviles siniestrados.

Lo notorio es que, con posterioridad a los dos primeros meses de 2013, nunca hubo menos de una decena de este tipo de rodados en los accidentes ocurridos durante cada mes.

Bicicletas

Pese al desplazamiento que trajo aparejado el progreso y las facilidades que se ofrecen para la compra de una moto, entre otros factores, la bicicleta no ha dejado de estar presente en las calles de las Villas.

Así lo reveló la presente investigación, al mostrar que en los siniestros se vieron involucradas 68 bicicletas (el 4%), móviles saludables para la salud y rentables para el bolsillo, pero, como ocurre con las motos, los más expuestos a consecuencias graves en caso de un accidente de tránsito.

Camiones

Los “pesados”, por su parte, también se sumaron a la lista de vuelcos y colisiones, con 39 unidades afectadas, es decir, el 2,26% de los rodados computados.

Con los vehículos de transporte de carga, sin embargo, se registró una tendencia declinante en cuanto a formar parte de los escenarios de los accidentes de tránsito, a tal punto que mientras durante el primer semestre se vieron involucrados 31 camiones, en la segunda parte del año esa cantidad se redujo a ocho.

Los otros

Por último, el informe incluye la participación de otros tipos de medios de movilidad que se caracterizan por tener características muy distintas entre sí.

Tal el caso de siete ómnibus (0,40%) accidentados, cuatro cuatriciclos (0,23%), las tres ocasiones en las que intervino el tren (0,16%), una máquina agrícola (0,05%), un rodado de tracción a sangre (0,05%) y hasta una patineta (0,05%).