Dirigentes de River Plate informaron que no participarán en el próximo Torneo de la Liga Villamariense de fútbol, aduciendo problemas económicos, pero el resto de los colegas de otras instituciones resolvieron, en la primera reunión de delegados del año, extender el plazo de confirmación de participación para el próximo martes, con el afán de no seguir perdiendo clubes en la competencia y encontrar una luz de esperanza en los próximos días.
Del mismo modo, se le pidió a los delegados de Juventud River de Ausonia que revean la postura para que también puedan participar, a pesar que la primera información fue que no ingresarán en el certamen.
La baja de dos clubes en el campeonato causó preocupación durante la reunión de delegados, que comenzaron a tratar el presupuesto en la reunión que inició el martes por la noche y terminó durante las primeras horas de la víspera.
Vale recordar que Juventud River informó su deserción por nota, días atrás, luego de no encontrar colaboradores ni apoyo económico para afrontar la temporada.
Días más tarde, River Plate de esta ciudad también puso en duda su participación y, si bien sus directivos hicieron reuniones con distintos actores de la ciudad para sumar apoyo, finalmente esperaron hasta la reunión, expusieron sus problemas y decidieron no intervenir en el próximo torneo.
En la misma reunión también se confirmó que Unión Central, cuyos directivos evaluaron en algún momento jugar este año, no volverá todavía a la competencia en primera división, aunque sigue en divisiones inferiores.
Mala suerte
Para los supersticiosos, el 13 es un número maldito, que debe ser enterrado, a punto tal que en algunos países como Francia no se le da ese número a las direcciones de las viviendas.
Este año, si finalmente se confirman las bajas de Juventud River y River Plate, el Torneo de la LVF tendrá precisamente 13 participantes, poco para una liga que, en lo deportivo, atraviesa un momento flojo, más allá de alguna que, en las finales, suele haber mucho público en las tribunas.
La falta de directivos que aporten, la poca colaboración económica en algunas ciudades o localidades, el estado de algunas canchas y el éxodo de figuras a ligas de la región suelen causar preocupación en una LVF que fue la única de la provincia que terminó su torneo local de 2013 en 2014. Y a ello se suma que, en esta temporada que se avecina, el inicio del certamen está programado para el 16 de febrero y algunos directivos no alcanzaron a rearmarse para empezar más temprano que de costumbre. Encima, Alem y Universitario, dos clubes que suelen ser notables protagonistas, le darán prioridad al Provincial mientras se dispute el torneo doméstico.
Con estos condimentos, los delegados esperan que tanto Juventud de Ausonia como River puedan encontrar una solución a sus problemas en estos días para confirmar la participación la semana próxima y, desde allí, armar la estructura del campeonato que viene.