Desde el Hospital Pasteur informaron que en diciembre y en lo que va de enero se duplicaron las consultas por picaduras de alacranes.
Este incremento responde a la comparación con los últimos tres años, ya que si se establece un corte por mes, había a lo sumo 10 casos.
Según relata Marcos Marín, responsable del área de prensa, las estadísticas demostraron que “en 2011 se presentaron 141 casos; en tanto en 2012, 145 y en 2013, 178 atenciones”.
Explica que no es posible hacer una división taxativa de cada año por la cantidad de meses, porque “justamente en diciembre se incrementaron”.
Esto significa que si se tomara como muestra el año 2013, se debería dividir 178 por 12 meses, pero sería irreal el cálculo porque “en diciembre solamente se atendieron 38 casos”.
Entre las causas menciona que “sin un resultado fehaciente, los motivos serían varios, sobre todo las altas temperaturas, la falta de mantenimiento de los terrenos baldíos y la suba en las obras de construcción, que hacen movimiento de tierra y materiales como escombros”.
Una relación directa podría establecerse con otra cifra y es que “la franja etaria más comprometida son hombres de entre 20 y 40 años, probablemente obreros y albañiles”.
Mientras que no hay especulaciones respecto a las mujeres de esa misma franja, que es pertinente recordar que no se encuentra en zona de riesgo vital ante el ataque de un escorpión.
Marín destaca que la labor de recopilación de datos se realiza en conjunto con el doctor Jorge Di Giovambattista, epidemiólogo del nosocomio, quien además aportó el dato de que de ese total, sólo cuatro casos fueron con picaduras de alacranes venenosos y no hubo ningún paciente a raíz de ello durante 2013.
Por otra parte, desde la Guardia dieron a conocer otra perspectiva a tener en cuenta que se relaciona con la cantidad de consultas diarias, con un promedio de cinco, de las cuales tres son por la noche. Momento en que estos animales salen de las cañerías o alcantarillas buscando refrescarse.
Dentro de los comportamientos que deben ser conocidos para prevenir picaduras vale decir que normalmente habitan lugares húmedos como los antes mencionados, por lo que es importante colocar rejillas en las salidas de agua.
Se alimentan de cucarachas, por lo que una buena forma de eliminarlos es haciendo una exterminación de éstas y, por último, no acumular basura, maderas o escombros sobre el pasto o la tierra porque allí suelen esconderse.
Es que más allá de que en la zona no son tan habituales los escorpiones venenosos, como sí existen en el norte cordobés, es fundamentalmente una cuestión de prevención.
La palabra experta
Ante la contundencia de los números y el ya conocido incremento de picaduras en las últimas semanas, EL DIARIO consultó sobre el tema a la doctora Graciela Ortega sobre las medidas preventivas y los cuidados a tener en cuenta.
En primer lugar, la infectóloga explicó que “hay que evaluar cada caso particular que llega a la Guardia, porque no todos reaccionan del mismo modo a la picadura, variando según el nivel de alergia del paciente”. Así, para algunos es más tóxico que para otros.
Un segundo aspecto, en estrecha relación con el primero, es que “hay sectores de la población más vulnerables como niños, adultos mayores y aquellos que padecen enfermedades previas renales, cardíacas y pulmonares, entre otras”.
Además, se explaya sobre las medidas urgentes que hay que tomar en caso de una picadura, “es fundamental ponerse hielo de inmediato para disminuir la absorción del veneno y acercarse a una guardia para que se le aplique un antihistamínico y, en unos pocos casos, el antídoto”. Luego, se recomienda un reposo de un tiempo que dependerá de cada paciente.
Otro punto que quiso resaltar es sobre la concurrencia con el escorpión, porque “muchas veces corren más riesgo al tratar de atraparlo y la realidad es que en el Hospital no tenemos los materiales para hacer las extracciones del veneno para hacer antídotos”.
De hecho suma que “lo único que podemos hacer es observarlos para saber si es o no venenoso y la especie”.
Por último, alude a que desconoce si en la capital cordobesa se realiza este tipo de extracciones, pero que en ningún caso sería posible trasladarlos, por lo que no es imprescindible atraparlos.
