Un encuentro casual sirvió para sembrar esperanzas. Esto ocurrió anteayer, cuando las dos hijas mayores de Mónica Donoso -la docente despedida el 6 de enero del municipio- se encontraron en la Galería Internacional con el intendente Eduardo Accastello, quien estaba en el lugar para ir a la peluquería, como hace habitualmente. 

En diálogo con EL DIARIO, Donoso relató que sus hijas le pidieron al mandatario que revise la situación que dejó sin el principal ingreso a una mujer que es sostén de familia.

Cabe recordar que la maestra jardinera se desempeñó durante siete años revistiendo el carácter de “facturante” en el Centro de Promoción Familiar de barrio Roque Sáenz Peña. 

Con la esperanza de tener la estabilidad laboral, rindió el concurso para pasar a planta y obtuvo el segundo lugar en la nómina de aspirantes. La que estaba en primer lugar renunció y, por lo tanto, debería ser ella la primera en ser parte del personal permanente de la comuna.

Sin embargo, el 6 de enero, el Día de Reyes, recibió como “regalo” un telegrama firmado por la coordinadora de los Centros de Promoción Familiar, Mariela Pajón, en el que le dicen que prescinden de sus servicios por “restructuración” del área.

No podía creer lo que ahora la esperaba, dado que esta mujer, que tiene a sus dos hijas mayores independizadas, pero que es sostén de la familia que integra su esposo e hijo de 13 años, no iba a tener ahora el ingreso mensual de cuatro mil pesos (a lo que hay que descontar lo que debía abonar de monotributo). “Ambos tienen una pensión de 1.700 pesos por discapacidad, dado que mi marido tiene la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) y mi hijo, Síndrome de Down”, dijo.

“Después de que mis hijas me contaron que pudieron hablar con el intendente, me quedé con esperanzas”, dijo. “A mí me gusta ponerme en el lugar del otro y, si bien el problema de la falta del ingreso principal de la familia es un verdadero drama para nosotros, entiendo que el intendente tenga que atender primero todo lo relacionado sobre el Festival de Peñas, que es importantísimo para la ciudad”, dijo.

De todos modos, entiende que la espera tiene una fecha de vencimiento. “Una vez que finalice el Festival, pediré una respuesta”, señaló.

Donoso también destacó el acompañamiento del Sindicato Unión Obreros y Empleados Municipales (SUOEM), dado que desde que la despidieron vienen haciendo gestiones entre funcionarios para lograr su reincorporación. “Pero todos le dicen lo mismo que le dijo Accastello a mis hijas, que lo van a analizar cuando termine el Festival”.

“Y también estoy muy agradecida del apoyo de compañeras y de madres de los alumnos, quienes se pusieron a mi disposición para lo que necesite”, agregó.

Si bien no hubo razones explícitas que hayan motivado a Pajón “prescindir” de los servicios profesionales de Donoso y de otra docente (embarazada), ella cree que tiene que ver con que su ingreso a la Municipalidad fue gestionado por la delasotista Rosa Cámpora, quien ahora ya no es parte del staff funcional de la comuna.

“Yo siempre estaré agradecida de Rosa porque cuando nació mi hijo necesité mucha ayuda y ella estuvo siempre conmigo para todo lo que necesitara. Y quiero aclarar que nunca me pidió nada, ni un voto, ni que militara para ella. Yo me siento su amiga”, destacó.

Lejos de la política partidaria y de las internas que puede haber entre funcionarios, Donoso sólo espera una cosa: “Volver a trabajar para sostener a mi familia”, concluyó.