El paso de Maná con elogios varios al Festival de Festivales y a Villa María fue el principal ingrediente en la carpa de prensa en la primera noche del evento, el jueves.
Pese a que todos lo esperábamos, quien no llegó a dialogar con los medios fue León Gieco, quien aparentemente tras brindar su show se sintió mal y se retiró del Anfiteatro.
En tanto, por el lugar también dijeron presente el intendente Eduardo Accastello y el gobernador de San Luis, junto a la ministra de Turismo de aquella provincia.
El primero en tomar contacto con los periodistas (que estuvieron en una carpa amplia, cómoda y con aire acondicionado) fue el villamariense Fabricio Rodríguez. “Desde chico escuchaba mucho folclore, pero nunca lo había exteriorizado en un escenario. Hace dos años, me convocaron desde el Festival de Jesús María y desde entonces no dejé de trabajar y visitar lugares del interior... mi vínculo con el folclore es más fuerte que con el rock”, confesó el destacado artista.
Como para seguir ahondando en sus preferencias, confió que le gustaría hacer un disco netamente folclórico, porque es un estilo “muy rico” . Y cuando le preguntaron si se sentía profeta en su tierra, dijo que no podría decirlo él, pero sí aclaró que siempre tuvo el respaldo de los villamarienses, con teatros llenos cuando había un festival o con la mano de empresarios para auspiciar. “Quizás hoy el reconocimiento es mayor por lo que me toca vivir”, añadió.
Más tarde pasaría por el espacio mediático el grupo Maná, previo a salir a escena, y con un Anfiteatro que se hacía sentir en su esplendor.
“A Maná siempre le encantó Argentina y nos habían hablado mucho de Villa María. Es un lugar precioso y tiene un lago bellísimo, cuídenlo mucho”, describió el líder del conjunto.
Consideró que las cualidades de la localidad y el evento en el coloso de cemento derivará en más dinero para la ciudad y turismo.
“¿Tienen 100 mil habitantes, no? Es alucinante el recibimiento que tuvimos. Había gente en el Aeropuerto y están frente al hotel”, abundó.
Ya desnudando un poco sus horas en la ciudad (habían llegado un día antes, el miércoles al mediodía), contaron que fueron a “cenar por ahí”.
Alguien le preguntó por qué dijeron presentes en este espectáculo dejando de lado a otros y la respuesta fue que se habían comprometido con los promotores de las peñas hace tiempo. Arriesgaron luego: “Se perfila como el de Viña del Mar”.
También avalaron la música argentina, diciendo que el folclore es “fantástico” y que “no hay que olvidarse de las raíces”.
En otro orden, develaron que en un cara a cara con el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, le reclamaron que realice la reforma migratoria, “como dijo que iba a hacer”, y el mandatario se volvió a comprometer en efectuarla.
La política
El gobernador de San Luis, Claudio Poggi, y la ministra Celeste Sosa, se sentaron junto a Eduardo Accastello para hablar con los cronistas cerca de la medianoche del jueves.
Ambos mandatarios se tiraron elogios mutuos sobre sus gestiones.
Accastello hizo hincapié en el plan de viviendas de la provincia vecina, en la cantidad de represas que logró y en que no tiene endeudamiento. En alusión al modelo San Luis, redobló la apuesta cuando declaró que quiere hacerlo en la provincia de Córdoba, ya con su traje puesto de candidato a la Gobernación en todo momento.
Poggi, por su parte, manifestó que ve a una Villa María que “crece muchísimo” y con un “intendente que piensa en el progreso”. “No sé si existe un evento así en la Argentina. No existe... y lo hizo un municipio”, remarcó.