Frente a la última devaluación, Carlos Castellani, presidente de la Cámara Argentina de Fabricantes de Maquinaria Agrícola (CAFMA), señaló que el ámbito que representa, al igual que la mayoría de los sectores, paralizaron las ventas por unos días “hasta tener más precisiones de las medidas anunciadas y ver la evolución de la moneda norteamericana”, indicó el dirigente a la revista especializada Maquinac.
Aseguró que el proceso de comercialización se pondrá en marcha lentamente y con ajustes en los precios, siguiendo el ritmo de la cotización del dólar.
“La inestabilidad cambiaria y la incertidumbre macroeconómica repercuten en la totalidad de los sectores de la economía argentina. La industria de la maquinaria agrícola no es la excepción, máxime cuando el sector está expuesto a los vaivenes del tipo de cambio a la hora de comprar insumos y fijar precios, al tiempo que demanda condiciones de previsibilidad, como cualquier actividad vinculada a la producción de bienes de capital”, aseveró a ese medio.
En lo que hace a los costos, dijo que “la devaluación del peso incrementa los costos internos del sector, lo cual se traduce en un ajuste de precios que se trasladan a los productos”.
“Además de su impacto en los costos generales, la fuerte suba de la divisa genera inconvenientes para el aprovisionamiento de agropartes importadas, al tiempo que reduce los plazos de financiamiento de insumos industriales”, agregó.
En el análisis, la especialista Mariana Escalerandi escribió. “Como contrapartida, la devaluación abre un escenario más interesante para el comercio exterior de maquinarias. El incremento del tipo de cambio permite recuperar parte de la competitividad perdida durante los últimos años, a consecuencia del incremento de los costos internos por encima de la evolución del dólar. No obstante, Castellani advierte que en la actualidad casi el 80% de los equipos fabricados en Argentina se destina al mercado interno, por lo que el incremento de las ventas al exterior incidiría en una porción minoritaria de la actividad”.
Dos temas más giran en torno al sector: uno, más positivo, es el del valor que alcancen los granos, dado que podría repercutir positivamente en la demanda interna de equipos. El otro, del que surgen muchas dudas, es el del financiamiento. “Un tema de crucial importancia será la evolución de los créditos a tasas subsidiadas que se venían otorgando para la adquisición de maquinaria nacional, fundamentalmente a través del Banco Nación. La virtual paralización de estas líneas genera inquietud en la industria, aunque habrá que ver en las próximas semanas si se trata de una medida coyuntural de los bancos (hasta que aclare el panorama macroeconómico) o si es de carácter permanente”, dijo el dirigente.
Finalmente, Castellani adelantó que desde CAFMA pedirán al Gobierno nacional que no se reduzca la financiación, ya que fue la principal herramienta que impulsó el movimiento del mercado en 2013.