Eso confió el cantante Carlos Baute, momentos antes de iniciar el espectáculo que brindó anteanoche en el Festival Nacional de Peñas.

Detalló que el disco anterior fue autobiográfico, repasó las canciones basadas en vivencias particulares y confesó, sobre su último material: “El 80% son historias de amigos, historias reales. El teléfono es un arma de doble filo porque te aleja de quienes tenés cerca, porque están en una reunión todos con el celular, pero también te acerca a quienes tenés lejos”, remarcó, señalando que en su vida de giras el Whatsapp le permite mantenerse comunicado con afectos que se encuentran a la distancia. Así, de esas charlas vía aparatos telefónicos, se inspiró para nuevas canciones. “Me robé parte de sus vidas por Whatsapp”, develó simpático a los periodistas.

“Son cosas que no me pasaron, pero que me pueden pasar”, dijo en alusión a las historias plasmadas en sus temas. Y añadió: “El amor es un misterio”.

En otro aspecto, Baute consideró que el cantar “Colgando en tus manos” junto a Marta Sánchez “fue un ticket de avión para llegar a ciudades o pueblos” diversos y aseguró estar encantado de participar del Festival villamariense. En tal sentido, contó que en 2002 estuvo en la Argentina, pero “en esa época no tenía idea de lo macro que era este Festival”, de cuya dimensión se enteró después y le dio “muchas ganas de estar”. “Hoy es conocido internacionalmente”, remató.

El artista, dueño de notable carisma y sencillez, evaluó que el público argentino “es lo más, es alucinante”, reveló que él canta todo el día y se lamentó por no haberle hecho una canción a su papá, ya fallecido; “por eso se la hice a mi madre”.

Otro de los temas que se tocó en la charla con la estrella fue el de la música digital. “Hoy se consume más música que nunca, la gente va al gimnasio, sale a correr, anda en el metro y hace deportes con audífonos, escuchando radio o algún disco. Esto se ve en YouTube, en el mundo digital”, analizó. Como contrapartida, “hemos perdido el disco impreso, pero a nivel digital no para de crecer. Desde ese lado, lo lamentamos. Yo coleccioné más de tres mil discos, leo los libritos que vienen con cada uno. Hoy, en cambio, es raro que un niño de 15 años tenga discos en su cuarto, pero sí tiene su teléfono o computadora lleno de música”.

 

Julieta y Tan Biónica

 

En la carpa dispuesta para el contacto de periodistas y artistas, Julieta Venegas afirmó sentirse feliz de estar por primera vez en Villa María. 

Confió lo bien que le hace “tener la suerte de contar con la música para expresarme” y a través de la cual cuenta historias. “A veces es una terapia escribirlas”.

Tras el show en el “Anfi”, aseveró que sintió que se “conectó muchísimo” con el público.

Precisamente, en alusión a la gente, desde su lugar ve al argentino como extrovertido y divertido, “son muy bonitos” y contó la experiencia que vive cuando alguien se acerca a pedirle un autógrafo, de manera desacartonada, lo que ella valoró.

 En tanto, “Chano”, de Tan Biónica, dijo que miden el éxito “en función de los kilómetros que recorremos juntos”. 

Los miembros del grupo son amigos desde la época del colegio y cada día celebran el suceso. “Por supuesto que está bueno el crecimiento exponencial del grupo, pero al éxito verdadero lo medimos en función de estar juntos”, señaló. 

Develaron que ya trabajan en la generación de un disco nuevo, “pero lo importante es el presente”. 

“Nos criamos en espacios de rock, tocando en lugares conocidos del circuito de Buenos Aires, donde se gestaron grupos. En su momento nos dimos cuenta de que no estábamos dispuestos a sostener clichés o puertas que el rock cerraba. Tan Biónica es un espacio de libertad, uno puede venir vestido como quiere, no hace falta tener un cinturón de tachas o campera para escucharnos. Que la gente se sienta libre, que no se cierren puertas. La música es para abrir puertas”, sentenció “Chano”.