Días atrás, la Cámara que nuclea a los productores de biodiésel reclamó al Gobierno nacional que actualice el precio de ese combustible, que sirve de “corte” al gasoil tradicional, tal como lo establece la legislación vigente.
El asesor Carlos Seggiaro, al ser consultado por este medio sobre la problemática, señaló que es una situación de coyuntura que se da a raíz de la devaluación que disparó los costos. Pero está convencido de que en las próximas semanas el Gobierno actualizará el precio del bio.
De todas maneras, considera que más allá de esa situación actual, la producción de ese combustible representa un negocio vidrioso, “al menos para los más chicos”.
“Hay un punto de inflexión desde que el Gobierno se hizo cargo de YPF. Allí empezó a desacelerar el precio del bio, porque las dos terceras partes las demanda esa empresa administrada por el Estado, a la que quieren hacer rentable”, señaló.
De todas maneras, entiende que los precios de los combustibles alternativos, aunque no sean los esperados, acompañarán el valor de naftas “que este año, de manera paulatina, irán subiendo al igual que el anterior, por encima de la inflación”.
Explicó que la ley que regula la producción de biocombustible abre tres ventanas al negocio:
-La primera es la de la exportación, que es un negocio para los grandes exportadores.
-La segunda es la producción para la mezcla con combustibles tradicionales.
-La tercera es para el autoconsumo.
“Las petroleras hicieron lobby en el Congreso para que no se les permitiera a los productores llegar al surtidor, como establecía el proyecto original presentado por FAA”, aclaró”. Entonces, les queda a los productores hacer bio para cortes, algo que no recomiendo porque el precio lo fija por decreto el Gobierno y en ocasiones puede no ser rentable, como ahora”, o bien “para el autoconsumo, que así dicho parece poco, pero creo que es porque no pensaron en las cooperativas. Hay cooperativas que tienen 15 mil socios y producir para todos ellos da un volumen importante”, señaló.
Esta adversidad de un sector que procuró agregar valor a la producción primaria no significa bajar los brazos frente a proyectos productivos.
“Lo que pasa es que hay que dejar de pensar en commodities para pensar más en especialities, es decir, cadenas de valor más especiales, como micronizados, harinas o concentrados proteicos o lecitina, por citar ejemplos”, concluyó.
“Hacer etanol con maíz es como hacer biodiésel con aceite de oliva”
Al ser consultado sobre las perspectivas de la planta de la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA) que en el corto plazo comenzará a producir combustible a partir de maíz en Villa María, Seggiaro señaló que en Estados Unidos la producción de etanol está cayendo, no sólo por la baja de subsidios para ese sector, sino también porque en el país del norte encontraron una nueva forma de extracción que multiplica las reservas de petróleo.
“Es el famoso shale oil” dijo. Hasta el momento, se estima que hay tres reservorios importantes en el mundo: Estados Unidos, China y la Argentina, con Vaca Muerta. “Un economista afirmó que si Vaca Muerta es lo que parece, equivaldría a 250 cosechas de Argentina”, dijo, para dar a conocer la magnitud de las reservas de combustible tradicional que hay en el país.
De todas maneras, entiende que ese dato puede preocupar más a las plantas chicas de biocombustible. “Con poco ACA se puede reconvertir, porque no olvidemos que usa un proceso de destilación a partir de la molienda húmeda, del que salen entre 300 y 400 productos”, señaló.
Igual, cree que en el corto plazo “va a funcionar” y para el largo plazo “se puede reconvertir”.
También hizo otra consideración que tiene que ver con la eficiencia del proceso de producción de energía. “Hoy, aunque parezca un ejemplo extremo, hacer etanol con maíz -como se hará en la planta de ACA- es como hacer biodiésel con aceite de oliva. Se puede hacer, pero es caro. Por eso los mejores son los que lo hacen con aceite de palma, que es el más económico. Y en el caso del etanol, lo más viable es con caña de azúcar, como lo viene haciendo Brasil”, concluyó.
