Luego de varios días de lluvias en la ciudad la mayoría de las calles del barrio La Calera contienen grandes charcos, sobre todo en las esquinas que dificultan el paso de vehículos, más aún de los motociclistas que maniobran hasta encontrar un paso entre el agua marrón, el barro y algunos pozos.
La esquina de Juan José Castelli y Marcos Juárez no es la excepción. Y Elvira, que vive a pocos metros de allí, cuenta que “el domingo tenía que comprar para comer: carnes, pan, entre otras cosas; pero mi hijo me dice que no salga cuando llueve, porque ya ha pasado que una señora se cayó en la esquina porque se junta mucha agua y barro”.
Basura que se acumula y agua estancada
Elvira, vecina que vive en la misma casa desde hace 50 años, cuenta que “antes vivía en otra casa, pero siempre dentro del mismo barrio”. Padece desde hace varios años la acumulación frecuente de una cantidad de basura considerable, que anega el paso del agua por el cordón cuneta. El montículo de basura se encuentra entre la vereda y parte de la calle, a unos tres metros de la puerta de su casa. “El agua de lluvia se estanca y ya está verde. Siempre se alerta a la gente que tenga cuidado con los mosquitos y las enfermedades, mucho más ahora en verano. Y esa agua, junto con la basura, trae todo tipo de bichos”, comenta.
Por el barrio, Elvira admite que el camión de la basura “pasa tres veces por semana” y “los días jueves puede venir el camión con pala mecánica a recolectar acumulaciones de basura en las calles, cuando vienen limpian muy poco, sólo lo que puede juntar la pala, pero una limpieza bien hecha, nunca”.
En la basura acumulada se encuentran tachos de metal, botellas, telas, plásticos, pedazos de caños, estructuras de sillas oxidadas, entre algunos otros elementos. “La Municipalidad debe notificarles a estos vecinos que ensucian que está errado lo que hacen. Deberían citarlos para controlar esta situación”, opina.
“Queremos que el municipio intervenga”
“Yo no quiero tener problemas con los vecinos y tampoco que mis hijos los tengan, pero no es saludable vivir así. Trato de mantener siempre limpia mi casa y mi vereda”, dice la vecina. “Este es un barrio perdido, olvidado”, agregó.
