Retomamos el contacto habitual con los amantes del golf para reflejar semanalmente la intensa actividad deportiva que en la temporada estival no ha cesado para nada. Al contrario, impulsados por los directivos del Villa María Golf Club se implementó la disputa de torneos semanales para ordenar un ranking de verano para motivar a los aficionados a obtener algunos de los premios consistentes en calzado e indumentaria especial para golfistas, se acreditarán quienes sumen los dos mejores scores acumulados en las categorías 0 a 16 y 17, 36 entre enero y febrero.

Tras los intensos calores, las temperaturas fueron benignas y propicias para que decenas de jugadores acortaran el receso, más allá de que a algunos turistas se les arruinaran las vacaciones. Así fue como un torneo reunió a 83 participantes y el pasado sábado fueron más de 65 los anotados.

En la semana actualizaremos las posiciones del escalafón cuando están a punto de culminar los torneos pactados para dar paso a la temporada oficial que -se presume- será apasionante.

El pasado sábado se impusieron en sus respectivas categorías Fernando Debiaggi y Daniel Gaido. Así quedaron las principales posiciones: 

Hasta 16 de hándicap (20 tarjetas)

Fernando Debiaggi 12 41 40 69

Mariano Bertón 9 38 41 70

María C. Ghione 9 40 40 71

Jorge Ferreyra 6 40 38 72

Adolfo Lizarralde 11 39 44 72

Pablo Grivel 15 41 46 72

De 17 a 36 (26 tarjetas)

Daniel José Gaido 22 43 46 67

Raúl González 18 44 42 68

Rubén Olivero 21 48 42 69

Julio Canevarolo 18 44 44 70

Andrea Gómez 21 46 46 71

Ariel Enzo Ghione 17 41 47 71

 

Dos águilas de película
 

Un hecho insólito e inusual protagonizó el empresario cinematográfico y encumbrado directivo del Villa María Golf Club Fernando Ateca. Lograr un águila (eagle, en inglés) en golf significa embocar en un hoyo con dos golpes menos del par. Suele darse en los hoyos en un solo golpe, generalmente, de par 3. Los más frecuentes se dan en los hoyos de par 5, generalmente cuando se llega al green en dos golpes y se emplea un solo golpe con el putter. Entonces, queda la variante de lograrlo en dos golpes en un hoyo de par 4, sea porque de salida se entra al green y se usa un solo putt o se emboca desde afuera. Pues esto último es lo que hizo el sábado el buen amigo Fernando en el par 4 del hoyo 7, que mide 345 yardas (310 metros desde la salida): driver, hierro 8 desde 95 metros y ¡adentro!

Pero lo curioso es que siete días antes, en el mismo hoyo 7 el mismo jugador ya lo había logrado de igual modo: driver, hierro 8 desde 90 metros y... ¡adentro! “No tenés puntería (o...fortuna) Gorosito...”

Sólo recuerdo un hecho parecido hace unos 30 años en La Gavea, Río de Janeiro, cuando el humilde profesional argentino Antonio Peralta logró sendos hoyos en uno en el mismo par 3 del hoyo 7 el sábado y el domingo, dos días seguidos, que le valieron ganar dos autos Ford Escort. En cambio para Ateca sólo lo premió la alegría de tamaña coincidencia.