Un ciudadano uruguayo, domiciliado en Tío Pujio, recibió ayer una condena de tres años de prisión de ejecución condicional, luego de que confesara en la Cámara del Crimen de Villa María haber agredido físicamente a su expareja.
Ivor Armando Costa, de 54 años de edad (7 de febrero de 1960), fue declarado autor responsable de “desobediencia a la autoridad reiterada”, “violación de domicilio”, “agresión”, “amenazas” y “lesiones leves”, por una serie de violentos episodios registrados en los últimos meses de 2009 y principios de 2010.
La demora en la sustanciación del proceso oral obedeció a que, hace poco más de dos años, el victimario y la denunciante, María Fátima del Rosario Perriere, llegaron a un acuerdo judicial a través de un “avenimiento”, lo que le permitió a Costa evitar una acusación mucho más grave y, por ende, una sanción penal aún más severa y de cumplimiento efectivo.
Aquel acuerdo de partes, que incluyó un resarcimiento económico para la mujer, no impidió que el convicto uruguayo tuviera que responder por los otros delitos que se le atribuían y que en la víspera terminó admitiendo al declarar en la sala ubicada en el quinto piso de Tribunales.
Sin embargo, la ausencia de antecedentes por parte del convicto uruguayo, sumada a la confesión lisa y llana de los hechos, motivó que la pena fuera en suspenso, circunstancia que le posibilitó continuar en libertad.
De todos modos, hay que señalar que Costa estuvo detenido alrededor de cinco meses, luego de que su expareja lo denunciara por los violentos episodios registrados entre octubre de 2009 y enero de 2010 en las viviendas que en esas fechas ocupaba Perriere en Villa María.
El 16 de octubre de 2009, incurrió en el delito de “desobediencia a la autoridad”, por incumplir una restricción judicial que le impedía acercarse al domicilio que por entonces ocupaba Perriere, en Malvinas Argentinas 1690 de esta ciudad.
En tanto, el 19 de diciembre de ese mismo año, Costa ingresó ilegalmente a la casa donde estaba radicada la mujer, en Santa Fe 1061 (pleno centro villamariense), donde la golpeó y amenazó, mientras que el 9 de enero de 2010 volvió a desobedecer la restricción judicial de contacto, en este caso al irrumpir en la vivienda paterna de la víctima, en la ciudad de Paraná.
Además de los tres años de prisión en suspenso, el agresor deberá someterse a una serie de reglas de conducta y no podrá acercarse a Perriere, quien desde hace bastante tiempo volvió a radicarse en la capital entrerriana, de donde es oriunda.
Cabe señalar que la figura del “avenimiento” (mediante la cual la víctima de un delito sexual podía solicitar un “perdón” para el perpetrador) fue eliminada del Código Penal de la Nación a mediados de marzo de 2012.
La audiencia de debate fue presidida por el camarista René Gandarillas y contó con la participación del fiscal Francisco Javier Márquez y del abogado local Héctor Gabriel Ranco, mientras que la secretaria actuante fue Gabriela Mercedes Sanz.
Cuando Costa y Perriere llegaron a un acuerdo, la mujer era patrocinada por el letrado villamariense Luis Caronni.
