Sumar 10 puntos de 15 no ha sido una situación constante en Alumni durante los últimos años, al contrario. 

El equipo villamariense siempre divagó entre lo malo y lo mediocre, peleando el descenso seguido, con producciones reprochables y sin un poderío futbolístico que se aprecie cuando jugaba en Plaza Ocampo.

Sin embargo, la marca pudo conseguirse en esta temporada, tras el arribo del entrenador Juan Manuel Ramos, quien por ahora registra los mejores números de todos los técnicos que tuvo el club en las últimas tres temporadas, incluida la del Argentino A.

A pesar que algunos cuestionan su forma de conducir; a pesar que sólo se maneja con pocos jugadores de experiencia; a pesar de la cantidad de bajas que padeció el plantel; a pesar que ni siquiera tiene arquero suplente; a pesar de todo, Ramos pudo hacer jugar y ganar al equipo como pocos esperaban.

La muestra se visualiza en la “Placita”, donde Alumni pudo hacerse fuerte y el pasado domingo llegó a su mejor nivel, derrotando con buen juego a Ferro de General Pico, que llegaba con el respetable cartel de puntero de la Zona 10.

El 2 a 1 favorable permitió saltar dos casilleros en la tabla de posiciones y dejó al equipo con una mejor perspectiva para zafar del descenso directo, algo que Ramos barajó con confianza desde su llegada, a pesar que asumió cuando la cosa venía muy mal barajada. 

A punto de cumplir con su objetivo, el “Negro” se mostró feliz el domingo, pero trasladó los elogios que le hicieron hacia los jugadores.

“El sacrificio que hacen estos muchachos es enorme; más no les puedo pedir”, afirmó el técnico luego de la victoria.

“Me voy conforme, satisfecho con la entrega del equipo, con lo que jugó”, resaltó, aunque también reconoció, como los futbolistas, que el problema fue no haber marcado otro gol para no terminar sufriendo. 

“No lo cerramos y nos pasó con Moldes también, pero ellos entienden el mensaje; el rival no tiró al arco en el segundo tiempo y si no lo ganamos por más es porque el fútbol tiene estas cosas y tuvimos que sufrir hasta el último”, recalcó.

“Nos faltó ponerle el moñito, erramos muchos goles, pero desde que estoy hemos sufrido los partidos”, agregó.

En cuanto a las falencias que se visualizaron en la defensa, sobre todo en la primera etapa, el técnico dijo: “Siempre tenemos problemas ahí porque cuando no improvisamos, aparecen algunas fallas, estamos con lo justo; pero yo resalto la actitud del equipo, por ahí se pasa de revoluciones y por eso quizás no lo liquidamos antes”.

Más allá de las falencias, Ramos destacó que “era un partido que había que ganarlo”.

“Lo importante que hemos logrado los tres puntos y ahora veremos lo que pasa en la última batalla para ganar esta guerra”, expresó, apuntando a lo que será el partido en Tres Algarrobos.

Para ello, indicó que “lo primordial es tratar de recuperar a los jugadores, por eso me da lástima lo de Sartor, que me parece, no va a llegar”.

También reveló que previo al partido, estuvo en duda Sebastián Godoy.

 “Estuvo enfermo toda la noche, no tenía fuerzas, estaba muy débil, pero terminó jugando muy bien; después lo puse al pibe González, a quien había visto el miércoles (en el clásico con Alem) y me gustó”, comentó.

En cuanto a los números que hay que hacer para salvarse, Ramos fue categórico: “Es todo un merengue, así que vamos a tratar de estar lo mejor posible para sumar y después ver qué pasa; esto sigue siendo dificilísimo, pero hay que tratar de que Alumni se quede en el Argentino B”.

Lo que Ramos tiene claro es que el domingo, su equipo jugó “el mejor partido”.

“Lo veía al equipo con un ánimo espectacular y lo demostraron jugando; de los cinco partidos que estuve, este fue el mejor; dominamos el campo de juego y tuvimos muchas situaciones de gol”, destacó Ramos, quien se apresta a dar otro salto de calidad el domingo, logrando un objetivo que por momentos rozaba lo imposible.

“Eran seis partidos por los que vine; van cinco y tengo fe en mis jugadores y lo vamos a sacar a Alumni para que se salve”, resaltó.

En ese contexto, muchos se preguntan qué hubiese sucedido si Ramos, con su impronta para darle un carácter más ganador al equipo, hubiese llegado antes.

Hasta el propio DT se animó a decir que “este equipo tendría que estar clasificado”. “Le ganamos al primero, al segundo, Estudiantes nos empató sobre la hora, en ningún momento fuimos menos que nadie, pero las cosas venían mal”, sostuvo, para finalmente recalcar que “con los nombres y los hombres que tiene el plantel, no podía estar así. Y si Estudiantes no nos hubiese robado esos dos puntos al final, estaríamos hablando de otra cosa”.  

 

Las alternativas

Con la resonante victoria por 2-1 de local sobre Ferro, Alumni nuevamente pasó a depender de sí mismo para sostener la categoría al superar en la tabla a Jorge Newbery de Villa Mercedes y Jorge Ross de La Carlota, que no lograron ganar el último domingo.