Escribe: Diego Pellegrini
Con la aparición goleadora de Rodrigo Santoni en el cierre de cada período, Rivadavia logró la máxima alegría en el clásico al derrotar anoche, de local, por 2-0 a Colón, en el partido correspondiente a la tercera fecha de la Zona A del Torneo Apertura.
Con los tres puntos, el “Verde”, que terminó con nueve, continúa invicto y es único escolta del líder Ticino, mientras que Colón, donde Bomprezzi vio la roja en el primer tiempo, sufrió su segundo revés consecutivo y sigue en las últimas colocaciones con tan sólo un punto.
El primer período tuvo un trámite parejo y con carencia de juego en ambos lados, aunque con la diferencia de que Rivadavia tuvo más la pelota y jugó mayor tiempo en campo rival. Igual, más allá de esa faceta, el local no fue punzante y le costó inquietar con mayor secuencia el arco rival.
A Colón le costó más todavía llevarle peligro a Berardo al no tener la pelota. Y, además, cuando se propuso a atacar, sólo Márquez pareció tener la llave, aunque el delantero ex-Argentino se encontró siempre en inferioridad numérica porque no tenía conexión con Demichelis ni el acompañamiento de los volantes.
Hasta que al minuto 42 llegó una acción clave para el partido con la expulsión de Ignacio Bomprezzi (el ex-River, extrañamente, se repitió en faltas). Ello entonó a Rivadavia, que tres minutos más tarde llegó al gol: centro por izquierda de Franco Rojas, Garis no pudo con Tissera y en el rebote apareció el capitán Rodrigo Santoni y anotó el primer grito de la noche.
En el complemento se vio una versión mejorada de Colón que, a pesar de la inferioridad numérica, adelantó sus líneas y con la habilidad de Márquez como estandarte, mostró decisión para buscar el empate.
En ese sentido, continuamente en las divididas y provocó situaciones que pusieron en jaque la diferencia de Rivadavia, como un centro rasante de Márquez que nadie conectó y un remate de Luna que Berardo logró atrapar.
A pesar de ese buen momento del visitante, Rivadavia tuvo lo suyo, porque cuando atacó contó con espacios y una clara muestra fue un mano a mano que no pudo capitalizar el recién ingresado Guillermo Arce.
Pero así como Colón sufrió la roja en el primer tiempo, lo hizo el “Verde” en el complemento con las bajas, por expulsión, de Franco Garis y Franco Rojas.
Fue allí cuando la victoria de Rivadavia corrió mayor riesgo, pero ni un nuevo tiro de Márquez y otro de Navarro fue suficiente para vulnerar al gran arquero del local, Marcelo Berardo.
Ya sobre el final llegó una gran jugada del pibe Facundo Castro minutos después de entrar y dejó solo a Rodrigo Santoni, quien con el arco a su disposición marcó el 2-0 final, lo que generó la algarabía de todo Rivadavia y el festejo desaforado por Marcelo Santoni, quien recorrió más de 40 metros para dedicárselo a un hincha.
Así, Rivadavia mantuvo su invicto, marcha en los primeros lugares, y le propinó otra derrota a Colón que, con un punto, aún no ganó en el campeonato.