En la edición del 21 de junio de 2013, EL DIARIO publicó una nota titulada “Una familia en emergencia”, la cual relataba la situación de Jésica Herrera y Germán Cabrera, que junto a sus cuatro hijos, vivían en la calle Chacabuco al 1230, en el barrio San Antonio. La vivienda, construida en adobe, estaba sufriendo serios problemas, ya que se trata de una construcción humilde. “Vivíamos con unos tíos de Germán, hasta que ellos se fueron a vivir a barrio Los Olmos y quedamos nosotros solos ahí”, contó Jésica.
En ese momento, realizaron un pedido a la Municipalidad de Villa Nueva, que le ofreció a la familia otorgarles los materiales necesarios para el acondicionamiento de la vivienda. Los materiales, nunca llegaron. Las promesas nunca se cumplieron.
La situación se hizo aún más crítica cuando la familia Cabrera fue avisada, una noche a las 5 de la mañana que el agua de la crecida del río Ctalamochita estaba ganando terreno en las calles del barrio. Jésica, con sus cuatro hijos y embarazada de siete meses, se fue a la casa de unos familiares que viven en el mismo barrio, pero adonde el agua todavía no había llegado. Desde ahí, los enviaron al IPEM 322, donde se congregaron alrededor de cincuenta evacuados durante la semana más crítica de la inundación en Villa Nueva. Y luego, fueron enviados al hostel Girando, donde se hospedaron hasta que la situación de emergencia concluyó. Desde el viernes, están alojados en la guardería de barrio Los Olmos. “Nos habían dicho que hasta hoy (lunes) podíamos quedarnos, para lo cual teníamos que buscar otro lugar donde vivir. Sin embargo, nos avisaron que podemos quedarnos una o dos semanas más”, dijo la mamá.

Pedidos de ayuda

Luego de publicar su situación y realizar pedidos en redes sociales y de acudir a los medios de comunicación, la respuesta del municipio, por fin, llegó. Ayer, la secretaria de Desarrollo Social, Eliana Onnainty, confirmó que “se ha realizado la compra de los materiales para la construcción, que serán entregados en los próximos días. En diez días, estarían ya construidas las habitaciones necesarias para que ellos puedan volver a su casa”.  Esa casa a la cual hace referencia Onnainty, hoy es un montón de escombros que se han erosionado con el agua y dañaron además electrodomésticos, muebles y casi todas las pertenencias personales de cada integrante de la familia.
En la guardería, mientras tanto, tienen a disposición todas las instalaciones,  incluyendo cocina y baño con agua caliente. Asimismo, duermen en colchones sobre el piso y Jésica tiene fecha de parto para la semana que viene.  Onnainty, aseguró que “hoy no pude hablar con la Secretaría Económica para ver si me autorizan el pago de un hotel donde puedan alojarse hasta que vuelvan a su casa”. Por otra parte, la secretaria, afirmó que “recién ahora me entero sobre la situación de ellos, que venía desde el mes de junio. Yo estoy en el área desde el mes de septiembre, por lo cual no estaba al tanto de su problemática”.
La familia Cabrera, más allá de la ayuda del municipio, necesita aberturas y los elementos para realizar la instalación de cableado eléctrico en la vivienda. Además, electrodomésticos, muebles y otros elementos como ropa, calzado y utensilios de cocina, también son necesarios.  Quienes puedan aportar contribuciones, puedan comunicarse con Germán Cabrera al  (0353) 154257980.