ATILRA, el gremio de trabajadores lácteos, puso en marcha en la localidad santafesina de Sunchales su Centro de Educación Tecnológica (CET).
Se trata de un complejo que funcionará como sede central de la red de formación para trabajadores que dispone el sindicato que tiene raíces en toda la cuenca láctea, como la de esta ciudad.
Para fortalecer la función académica del CET, en la jornada de apertura firmaron un convenio con el Ministerio de Educación de la Nación y el rector de la Universidad Nacional del Litoral.
Entre las autoridades que se dieron cita en Sunchales, estaban el diputado nacional Martín Gill, el Subsecretario de Lechería, Arturo Videla, y el rector de la UNL, Albor Cantard.
El acto se dio en el marco de la celebración de la III Conferencia Mundial del Sector Lácteo, que se realizó en esa ciudad santafesina y que es organizada por la Unión Internacional de Trabajadores de la Alimentación (UITA).
El convenio, suscripto por Sileoni, Cantard y el titular a nivel nacional de ATILRA, Héctor Ponce, “se propone desarrollar acciones de cooperación dentro del Programa de Expansión de la Educación Superior, con la finalidad de implementar ofertas académicas”, informaron
“Esta iniciativa tiene por finalidad principal evitar el desarraigo de los jóvenes de la región, poniendo al alcance de los ciudadanos la posibilidad de estudiar y desarrollarse en su localidad, evitando la emigración a los grandes centros urbanos”, destacó Sileoni.
Por su parte, el diputado Martín Gill destacó que el convenio entre Educación, UNL y ATILRA representa la alianza entre el mundo de la academia y el del trabajo. “Es la expresión para resumir todo lo recorrido durante estos diez años”, afirmó.
De la misma manera, subrayó “el compromiso en la constitución de una política por parte del estado nacional, a través del diseño de estrategias para llegar a toda la Argentina con una educación superior inclusiva”. “Se trata de una acción profundamente federal, que garantiza tanto el progreso individual de cada joven que accede a una carrera universitaria, como el progreso de toda la comunidad”, explicó.
El convenio tiene como objetivo impulsar la calidad educativa, brindando al sector productivo, industrial y tecnológico recursos humanos locales con capacitación adecuada, a fin de fomentar el crecimiento y desarrollo económico de la región. Además, la cartera educativa se compromete a brindar los recursos financieros necesarios para el dictado de las carreras.
El sindicato de trabajadores lácteos invirtió 50 millones de pesos en el complejo que dispone de cuatro edificios distribuidos en un predio de más de seis hectáreas, el centro educativo propiamente dicho, un auditorio, un pequeño hotel y un área de vigilancia.
El edificio destinado al centro educativo se desarrolla en dos plantas, con once aulas para treinta alumnos en planta baja, y un aula magna preparada para albergar a 120 personas. Además del hall de ingreso al edificio, en la planta baja se ubican las oficinas administrativas y una sala de reuniones, entre otras dependencias.
En la planta alta se despliegan trece aulas de características idénticas a las anteriores, un sector administrativo con una importante sala de reuniones, sanitarios y la biblioteca, con sectores de estudio en silencio, sector de consultas y archivos. Este edificio posee 4.788 metros cuadrados de superficie cubierta y 130 metros cuadrados de superficie semicubierta.
El auditorio posee unos 1.183 metros cuadrados de superficie cubierta y otros 192 metros cuadrados semicubiertos, entre otras características.