Frente a una destacable cantidad de productores regionales reunidos en Sociedad Rural, el especialista en asesoramiento y servicios para la producción de leche, doctor Marcelo Avaro destacó los beneficios derivados de un buen manejo reproductivo, puntualizando los avances conseguidos en tal temática, tanto en el factor cuantitativo (rentabilidad), como en los aspectos cualitativos (calidad) del producto lácteo.
Entre otros conceptos manifestó “que la idea principal es evolucionar en la estrategia reproductiva de los establecimientos del sector, pues un correcto abordaje tiene un alto impacto en los beneficios económicos de la explotación”. “Muchos tratamos de mejorar la nutrición o bien la sanidad, pero en realidad pueden darse fallas reproductivas que desconocemos; existiendo toda una metodología con técnicas adecuadas para hacer que esto sea lo más eficiente posible, obteniendo una mejor renta económica en el tambo, aspecto que hoy está realmente complicado”.
Explicó “que el correcto accionar de ello parte desde la preñez de una vaca (en tiempo y forma) para que produzca leche y al parir nos dé una cría a la que debemos desarrollar bien para que a su vez y sucesivamente nos proporcione otra cría y obviamente mejores cantidades y condiciones de la leche”. “Incluso puedo afirmar que aquellos productores que tienen un muy buen manejo reproductivo, pueden mejorar aún más y aquellos que no lo tienen acceder a su conocimiento para conformarlo”, subrayó.
“Se ha avanzado mucho en el país, ejemplo concreto es que los últimos 23 años la producción de leche aumentó un 89%, pese a que cerraron el 65% de los tambos, que es una cifra impresionante; en instancias futuras tenemos mucho aún por seguir mejorando”.
Afirmó “que el tambo es un sistema muy complejo donde está involucrada la genética, la nutrición, el manejo, el confort y otras cosas más, dentro de las cuales el correcto accionar reproductivo tiene importancia sustancial sobre la producción láctea”.
Avaro sostuvo que la eficiencia es fundamental, “pues si no logramos eficiencia tendemos a desaparecer; en los últimos años los pocos que quedaron crecieron por ser eficientes y por aplicar criterios más avanzados en tecnología y manejo de rodeos evitando ciertamente las preocupantes fluctuaciones en el precio de la leche”.
Conceptuó que “las vacas se deben preñar rápidamente”, agregando “que un mal manejo reproductivo también afecta la reposición de nuestras vaquillonas; por ello hay que aplicar estrategias positivas en esta temática para lograr objetivos posibles a través de un monitoreo permanente”. “Empezar con un buen inicio de lactancia, liberar las vacas a servicio en condiciones, definir el servicio de espera voluntario, diagnosticar precozmente las preñeces, definir qué hacer con las vacías y con las que no reciben servicio, entre otras medidas”, concluyó.