Debieron pasar 36 años para que Adalberto Otero Wilson, el poeta y compositor oriundo de Gualeguaychú, volviera a pisar el escenario que lleva el nombre de su ex socio, amigo y hermano del alma: Hernán Figueroa Reyes.
El creador de la letra a la “Zamba para Villa María”, recibió un merecido homenaje anoche en el marco del Festival Nacional de Peñas al cual visitara por primera vez en 1973 para presentar la afamada zamba, ante una audiencia enfervorizada y junto a artistas de la talla de Falú, Dávalos, Los Trovadores y Los Tucu.
Así lo recuerda el propio autor, en diálogo con EL DIARIO: “Con Hernán -con quien se conoció en un festival de la Nueva Canción- escribimos la zamba en un viaje desde Buenos Aires a Cosquín. El me hablaba de esta ciudad, de su gente. Me decía ‘es un lugar especial con gente especial, porque la mirás a la cara y sabés que es franca’. Me hablaba del Tito Suárez, de quien después me hice muy amigo y quien quería que yo recitara el poema ‘Niña de Villa María’, el mismo que había interpretado aquella noche pero que lamentablemente la he perdido. A esta ciudad yo la conocía porque era una de mis escapadas desde Río Cuarto, donde yo vivía y estudiaba. Me acuerdo que en aquel viaje con Hernán yo le recité la primera copla (‘Si me preguntan cuál es la niña que yo más quiero...’) y él me dijo: ‘Pará el auto, conducí vos’ y se puso a componer la música ahí mientras yo pensaba en la siguiente copla. Pensar que a los pocos días de tan hermoso homenaje que recibió el Flaco (así recuerda a Hernán) en esta ciudad, se mata en un accidente automovilístico (el 2 de febrero de 1973). De milagro que yo no estuve en ese auto, porque él se volvía de un festival en mi ciudad y yo decidí quedarme”.

@ Si por febrero...

Vale señalar que Otero Wilson es un prolífico autor de algunos hits de artistas de primera línea como María Martha Serra Lima, Julia Zenko, Los Cuatro de Córdoba y Tormenta, además de ser el creador de la música para la novela “Amo y señor” y seis temas para el recordado “Topo Gigio”. El hombre, que tiempo atrás había elegido el ostracismo tras frustrados proyectos profesionales, salió de nuevo del cascarón “sólo por Villa María”, a quien le autorizó modificar el pasaje que referencia al mes de realización del Festival por: “Si por febrero anda cerca...”.

@ “Es un sueño”

Anoche, junto a Otero Wilson subió a escena su coterráneo Ricardo “Pico” Silva y su conjunto (con su padre Carmelo en bandoneón) para interpretar la zamba. Silva, quien gira por América y Europa con su compañía Argentina Tango Folc, fue uno de los principales artífices para que Adalberto volviera a la ciudad. Para “Pico” también fue como cumplir un sueño. Silva, siendo preso político durante la dictadura, le prometió a un compañero de celda de nuestra ciudad que algún día iba a actuar en el Festival de Peñas. Quizás sea por fortuna o por el inevitable destino. Ayer se hizo realidad.