Ovacionado y aplaudido, prácticamente fue uno los instantes más significante de la noche junto a la aclamación que tuvo Omar “Cacho” Ermácora. Así Diego Marín tuvo ayer el reconocimiento que merece en el fútbol doméstico al notable máximo goleador de nuestra Liga Villamariense.
Junto a Cristian Agosto, Marín es hoy por hoy el símbolo de los jugadores que, más allá de sus notables condiciones, forjaron y desarrollaron su enorme carrera en estos pagos, sin necesitar de la trascendencia de aquellos jugadores que rompieron latitudes y tuvieron reconocimiento provincial y nacional.
Una distinción especial y justa para un goleador que, por su lugar de contemporáneo, todavía continúa festejando sus goles en la actualidad.
Con la modestia que lo caracteriza, Marín explicó sus sensaciones por el reconocimiento en diálogo que tuvo con EL DIARIO en la fiesta centenaria: "Es muy lindo que te reconozcan lo que hiciste”.
Y reconoció: “Por ahí uno no se da cuenta de todo lo que hizo porque siempre vivió el día a día y hoy cuando mira para atrás se pone a pensar en todo lo que logró. Esto es una alegría que cobra más importancia cuando alguien te lo reconoce".
En otro punto, recordó su debut: “A los 16 años debuté oficialmente en primera, aunque desde los 15 ya lo había hecho en algunos partidos amistosos, con la camiseta de Colón de Arroyo Cabral" y explicó que, más allá que tiene casi 300 goles, el primero tardó en llegar ya que “demoré varias fechas en poder hacer mi primer gol, porque no había forma de embocarla hasta que se dio”.
Justamente, ese estreno en la red, lo recuerda a la perfección y que tuvo además otros protagonistas que también dejaron su impronta: “El primer gol nunca me lo voy a olvidar porque al pase previo me lo dio mi amigo Mauricio Morales. Fue en un partido contra Sportivo Playosa, donde atajaba Silvio Munch, un arquero que para mí era uno de los mejores".
Y ante la consulta de aquella conquista que más le gustó, indicó: "Hubo varios goles importantes, para pelear arriba, en un clásico o para clasificar. Quizás al más lindo lo hice en la vieja cancha de Alem, después de arrancar desde la mitad de la cancha".
Sobre si tenía en cuenta la cantidad de goles, el ex-Colón manifestó: "No imaginé llegar a esta cantidad de goles ni tampoco nunca conté mis goles, porque viví sin darme cuenta de lo que podía llegar a hacer. Siempre pensé que yo era uno más en los distintos grupos que me tocó integrar y no me fijaba en lo que hacía".
"Siempre traté de sacar mucho de los jugadores que veía en ese momento. Yo era chico cuando debuté y en ese momento había aparecido Mauricio Morales, Diego Valle y muchísimos otros jugadores que ahora no recuerdo, pero siempre primero miraba a la persona” y, en ese sentido, recalcó “Iván Bitar fue alguien fundamental para mí, porque cuando tenía que pedirle un consejo el ‘Flaco’ siempre me lo daba".
Y, por último, destacó: "Lo primero que pienso ahora es disfrutar el poco tiempo que me queda y estoy ansioso por disfrutar de mi familia. No analizo dónde quiero retirarme, sí me gustaría hacerlo con mis amigos del fútbol".