Nicolás Bizzarri tiene 24 años, es profesor de Educación Física, y por su pasión por lo que hace -desarrollada en un gimnasio, en la pileta comunitaria y en un equipo de handball- se ganó el cariño de muchos villamarienses.
A fines de enero, se lanzó al agua en El Torreón, en Santa Rosa, y se golpeó la cabeza. Desde entonces lucha por salir adelante, internado en la capital cordobesa.
Por la repercusión del caso, atento al afecto que despertó en muchos, este diario había hecho una nota en febrero, la que finalmente no salió a la calle por pedido del entorno familiar.
Nicolás sufrió una severa lesión cervical, fue operado de urgencia en la ciudad de Córdoba y salvó su vida tras dos meses de una férrea lucha. Por ahora sufre una parálisis general a excepción del brazo izquierdo, y sería inminente su salida de la clínica, donde pasó eternas jornadas en terapia intensiva. Lo que viene es arduo, pero por su coraje y fortaleza, además del excelente estado atlético (no fuma, no toma alcohol y vivía para el deporte), sus amigos creen que saldrá adelante.
El corredor Ariel Guarino es uno de ellos. Le dijo ayer a EL DIARIO que “la rehabilitación demandará 35.000 pesos por mes”, por lo que todos sus afectos ya iniciaron una fuerte campaña solidaria para reunir fondos.
En estos días Nicolás saldría de la clínica y permanecerá en Córdoba, para someterse a un demandante proceso de rehabilitación.
Quienes quieran colaborar pueden hacerlo a través de la cuenta número 5640825228, de la sucursal 3810 del Banco Nación de Villa María, la que está a nombre de Mario Alberto Bizzarri (CBU 01105643/30056408252283.
Quienes residen en el extranjero y lean esta nota, pueden hacerlo desde Western Unión a nombre de Ariel Enrique Guarino, Villa María, Córdoba.
Ariel también llamó a la solidaridad de algún empresario que quiera apostar por la recuperación de Nicolás. “Tenemos una fundación en donde pueden descargar IVA legalmente, ayudando a esta gran persona, a la que conocí en un gimnasio y de quien no tengo dudas que va a volver a caminar”, sentenció.
Guarino ya hace tiempo que viene impulsando la recolección de dinero. Así, se consiguieron 5.700 pesos y se posibilitó el tener una silla de ruedas reclinable con todo lo necesario, el colchón inflable antiescaras con motor incluido (lo otorgó Valeria Díaz), entre otros objetos. Se conoció que la empresa local Distrifarma dejó a un precio económico lo que los amigos de Bizzarri necesitaron. Y hubo muchas otras personas que ya le tendieron la mano.
Nicolás es soltero, está de novio y en este momento cuenta con la permanente compañía de su familia, que desde ocurrido el triste suceso está instalada en la capital cordobesa.