“Encantado conocerte” es un sistema de encuentros para personas solas que ideó Carina Noemí Marassa junto a un equipo integrado por Claudio Rocha como máster web y Mariana Delgado.
“Es un sistema que nace en Europa y que es muy común en Estados Unidos”, explicó Marassa a EL DIARIO. Ahora, llegó a Villa María.
Se trata de un encuentro programado en el que las mujeres esperan en una mesa a los varones que tendrán ocho minutos “para dar esa primera impresión”.
“El primer encuentro en Villa María se realizará en mayo. Estamos en la etapa de inscripciones”, explicó.
Se reunirán en Meroi igual número de hombres y mujeres para que se puedan conocer. “Luego, cada uno tiene tres opciones: decir si encontró afinidad, dar una segunda oportunidad o directamente rechazarlo”, indicó.
Tras cruzar esas opciones, enviarán los datos de las personas que se aceptan. “Puede ser el amor de tu vida o, simplemente, la posibilidad de conocer a un nuevo amigo o amiga que te haga un poco más feliz”, dijo Marassa.
El origen
“Cuando falleció mi padre, mi mamá tenía 43 años y la vi sumergida en la soledad, sin animarse a salir a tomar un café, con un círculo de amigas casadas y con pocas opciones para relacionarse”, señaló, al referirse a cómo surgió la idea del sitio “Encantado conocerte”.
“Ese fue el disparador del proyecto. Pero más ahora, que veo que la tecnología permite estar más conectado, pero menos comunicado, creo que es bueno el tipo de encuentros cara a cara. Mucha gente me dice que no chatearía con un desconocido, que le inspira desconfianza una foto y que no se animaría a encontrarse con alguien que conoció en Internet. Por eso propongo un encuentro cara a cara”, explicó.
“Además, a lo largo de mi vida he sido bastante ‘celestina’ y tuve la oportunidad de presentar a gente que hizo pareja. Creo que pasa porque miro la vida desde el amor”, agregó.
“Charlamos mucho con Claudio y Mariana y pensamos en varias alternativas. Por ejemplo, los viajes de solos y solas, pero son para gente que tiene disponibilidad de tiempo y de dinero”, indicó.
“La idea de poder mirarse a los ojos por ocho minutos -tiempo establecido para poner reglas de juego-, para tener una primera impresión real, no virtual”, agregó.
“Creemos que es una forma de conocer gente simple y sencilla. La inscripción es en la página web y sin costo. Sólo se abona al momento de aceptar participar del encuentro”, opinó.
Las personas que se inscriben deben dejar sus datos básicos para poder conectarlas “los que son resguardados con seriedad” y si quieren, pueden agregar algunos gustos o actividad, para programar encuentros por afinidades. El resto, el tiempo dirá.