En 2013 el Gobierno de Guillermo Cavagnero acentuó el cumplimiento del pacto con los gremios por la no precarización laboral. Esto se desprende del dictamen de los tribunos de Cuentas sobre lo ejecutado presupuestariamente en el período que fue del 1 de enero al 31 de enero del año pasado. 

La buena noticia permite hacer algún tipo de comparación con el municipio vecino, Villa María. A pesar de que la comuna liderada por Eduardo Accastello tiene superávit anual -como contracara de la gobernada por Cavagnero- muestra una importante cantidad de personal precarizado, ya sea como contratados o como facturantes.

En la Municipalidad de Villa Nueva había, hasta el último día de 2013, 250 empleados: 246 trabajadores mensualizados que estaban en planta permanente, dos jornalizados y dos contratados.

Si se mira hacia atrás se constata la caída en la cantidad de contratados, algo que demandaban desde los gremios: en 2009 había 46 personas en esa situación, en 2011, 17; en 2012, cinco y finalmente en 2013, dos.

En cuanto a la planta política no ha habido mucha variación: en 2009 había 34  funcionarios políticos, en 2011, 30; en 2012, 26 y el año pasado subió a 29.

Como los datos, que surgieron esta semana por el dictamen del Tribunal, corresponden al período pasado, ayer EL DIARIO buscó la palabra de la delegada de trabajadores por parte del Sindicato Unión de Obreros y Empleados Municipales, Mónica Gramaglia, para conocer la situación actual. La dirigente dijo que en el presente “hay muy pocos facturantes, en el Corralón hay cinco y en el hospital pocos”. Precisó que los del Corralón que están en esta situación “reingresaron al municipio luego de haber sido echados tras estar 5 años de contratos” y aseguró que van a  pasar a planta.

“Años atrás había 42 contratados y pasaron a planta 40 personas. Renunciamos a un porcentaje de incremento salarial a cambio de ese compromiso y el Gobierno ha ido cumpliendo. Ha habido muchos logros”, consideró.

 

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