La apuesta del municipio en materia de tránsito en los últimos tiempos es fuerte. Colocación de reductores de velocidad, semaforización, controles en la vía pública o campañas de concientización son acciones que pueden observarse a simple vista en la ciudad y que se vienen desarrollando desde el año pasado con el objetivo de reducir el número de accidentes.
Sin embargo, si se hace una comparación entre el número de siniestros viales sucedidos durante el verano de 2013 y el verano de 2014, en promedio, no se ha conseguido mermar la cantidad de choques. De hecho, el número es idéntico para ambos períodos.
Entre enero y febrero del año pasado, según estadísticas brindadas por el Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Villa María, ocurrieron en promedio 48,5 accidentes. Es decir, algo así como 1,6 por día. Exactamente la misma suma de sucesos hubo en el mismo período de este año.
En enero de 2013, hubo 35 colisiones de tránsito y 62 en febrero; mientras que en el primer mes del corriente año hubo 48 y durante febrero 49. La diferencia está en que se produjeron 13 accidentes más que el año pasado durante enero, pero 13 menos en febrero.
Iguales accidentes, más autos
Pese a las estadísticas, el titular de la Secretaría de Prevención Comunitaria y Derechos Humanos, Carlos De Falco, aseguró que “hemos notado en estos últimos meses una merma en la cantidad de accidentes, o por lo menos, que el número se ha mantenido”, pero consideró que “el análisis debería analizarse más a largo plazo, es poco tomar referencia de sólo dos meses”.
Con respecto a los números, para De Falco, “hay que analizar los valores reales”, y explicó: “Si se ha mantenido el número o el promedio, hay que tener en cuenta que en el último año se ha incrementado considerablemente el parque automotor. Hay unos cuatro mil vehículos más con respecto al año pasado y, en términos generales, eso influye directamente en la cantidad de accidentes”.
Una de las cosas que más se perciben al transitar por la ciudad en cuanto a medidas del municipio a favor de la prevención de accidentes, son la gran cantidad de reductores de velocidad que han sido colocado en el último tiempo. Al respecto, el funcionario explicó que “en las esquinas es donde más accidentes se producen”, y que “los dos causantes principales de ello son la velocidad, en primer lugar, y el respeto por la prioridad de paso”, por eso destacó que “con el reductor de velocidad se consigue justamente eso, que se vea obligado a reducir la velocidad y, por la ubicación del mismo, que se vea obligado a respetar la prioridad, por eso consideramos que es conveniente poner más”.
Los rectores -explicó-, se colocan de acuerdo a pedidos formales por parte de vecinos, o por la propia observación de los lugares más conflictivos para transitar: “No hay muchos pedidos en forma individual, pero sí por grupos de vecinos o centros vecinales, pero, además, como en el caso de los que colocamos en el puente negro, surgen de la propia observación”.
“Mucha gente, cuando se refiere a que tuvo un accidente, dice ‘pero si fue sólo un segundo’, ‘o me descuidé un segundo’, y justamente, a 40 km/h un auto recorre 11 metros en 1 segundo, es decir, puede cruzar prácticamente toda la esquina. Por eso hay, más allá de que esa sea la velocidad permitida para circular por las calles, a la esquina hay que llegar a menos de 20 km/h, para tener dominio del vehículo”, explicó.
El secretario de Prevención Comunitaria entiende que hay zonas donde lo necesario no es un reductor, sino un semáforo, alguno incluso en remplazo de las lomas de burro, como fue el caso de la esquina de bulevar Sarmiento y Antonio Sobral. De los 89 semáforos que hay en la ciudad, contó, “en el último tiempo se han agregado seis, y hay un séptimo pronto a colocarse en el barrio Barrancas del Río, sobre avenida Savio”.
Por otra parte, en agosto de 2013 el intendente Eduardo Accastello había asegurado que, en la costanera, la idea era “realizar pasos de peatones a la altura de las veredas, de dos metros de ancho, con la finalidad de priorizar al que camina y reducir la velocidad”. De Falco comentó que esa obra “está en proceso de materialización”, pero que “diversas situaciones provocaron que se demorara un poco” y que van a ser colocados en poco tiempo.