“Me gus­ta­ría que el 2 de ma­yo, mo­men­to en el que mu­rie­ron más sol­da­dos, se dé un ho­me­na­je pa­ra que esa fe­cha es­té siem­pre pre­sen­te. En Puer­to Bel­gra­no ese día se ha­ce siem­pre el mi­nu­to de si­len­cio y mu­chas co­sas, lo que acá no lo veo. No pi­do que sea fe­ria­do, pe­ro al­gún re­cor­da­to­rio, mi­sa o en­cuen­tro es­ta­ría bue­no. En Puer­to Bel­gra­no me de­cían ‘qué ra­ro que no ha­gan na­da pa­ra esa fe­cha’”.

Esto había dicho Mauricio Güizzo, primogénito de Norberto, uno de los dos soldados villamarienses (junto a Adrián Busto) que dejaron su vida en la guerra de Malvinas, en una entrevista que EL DIARIO publicó el 5 de abril pasado. 

Hoy se cumplen 32 años del fallecimiento de su padre, ocurrido el domingo 2 de mayo de 1982 al hundirse el ARA General Belgrano, a consecuencia del ataque del submarino nuclear británico HMS Conqueror, registrado fuera del área de exclusión.

El hundimiento del crucero argentino posibilitó a los británicos la superioridad naval en la zona, causando la muerte de 323 argentinos, es decir casi la mitad de las muertes argentinas durante el conflicto.

Mauricio informó ayer a este matutino que hoy se realizará una misa, para orar por los caídos en la guerra, en la Capilla Nuestra Señora del Valle, ubicada en Sucre 350 de esta ciudad.

Esta semana, a la par de la denominación del barrio Malvinas Argentinas (ver página 4), los concejales villamarienses modificaron las ordenanzas 1.984 y 1.989, con la finalidad de agregar la leyenda “Héroes de Malvinas” a las cortadas designadas con los nombres de Cabo Adrián Busto y Cabo Norberto Güizzo.