Negligencia que costó una vida
Mi padre ingresó el día 1 de abril a la Clínica Cruz Azul con un dolor impresionante en el vientre. Lo internaron hasta el día 5 de abril, que le dieron el alta, habiéndole diagnosticado constipación. Pero no lo fue a ver ningún médico, sólo las enfermeras le pusieron calmantes y suero.
En los días siguientes, el cirujano Rivoyra le pidió una placa de pulmón y tomografía computada de vientre, porque mi padre seguía con mucho dolor pero en su casa.
Pasaron 10 días y todavía no sabíamos qué tenía, hasta que el día 18 de abril mis hermanas y yo decidimos internarlo por nuestra cuenta porque no lo veíamos bien.
Le mandamos un mensaje a su doctor de cabecera (J. Rodríguez), pero nunca contestó.
Lo dejaron internado y la mañana del 19 de abril lo levantaron temprano, lo bañaron (él ya tenía neumonía) y nosotras, leyendo los estudios que le habían hecho, descubrimos que nuestro padre tenía un quiste. Eso era el gran dolor que sufría. No sabemos por qué nadie nos dijo lo que tenía mi padre realmente y tuvimos que leerlo.
Ese día, a las 8 fue mi hermana a cuidarlo y mi padre estaba muy dormido. En ese momento, va la doctora Del Barrio, miró las placas que le habían hecho y ordenó realizarle a las 18 otra tomografía computada en el Roentgen. Mientras él seguía sin despertarse porque, según las enfermeras, le habían suministrado calmante, "que lo planchó".
A las 14.30 vi que mi padre seguía durmiendo y consulté con las enfermeras acerca de su estado, pero la respuesta que obtuve fue un "no sé".
Al rato, una enfermera fue a medirle la tensión, lo zamarrearon, le gritaron al oído y mi padre no reaccionó. Mientras otra enfermera se la pasaba hablando y mandando mensajitos por su celular, mientras atendía a mi padre.
A las 16 tenían que suministrarle el "contraste" para que a las 18 le hagan la tomografía, pero eso nunca sucedió.
Recién a las 17.50, 10 minutos antes de que lo llevaran, la enfermera llamó al doctor y le preguntó cómo hacía con el paciente (mi padre) para suministrarle el contraste porque todavía estaba dormido y no reaccionaba. Colgó el teléfono y le dijo a su compañera que tenían que ponérselo por sonda.
Ahí yo les planteé que cómo iban a suministrarle eso por sonda si estaba con oxígeno y no podía tragar porque no reaccionaba, además debían dárselo a las 16 y eran las 17.50.
Entré a la pieza y lo vi a mi padre con la sonda puesta y las enfermeras me hicieron salir. Justo en ese momento llegó la camilla de la ambulancia Vital que habíamos pedido para llevarlo a Roentgen y de repente se escuchan gritos de las enfermeras llamando al doctor, porque a mi padre le había dado un paro cardiorrespiratorio.
¡Cuánta negligencia! Lo llevaron a terapia y falleció a los 15 minutos.
Mis hermanas y yo estamos disconformes con la atención de las enfermeras y doctores que estuvieron de guardia el día 19 de abril de 2014 en la Clínica Cruz Azul porque vimos mucha irresponsabilidad, no hicieron las cosas bien y no respetaron a mi padre como paciente.
Cesar Rossi, nuestro padre, descansa en paz.
Carina del Valle Rossi.
DNI: 22.672.468.
Conmemoración al hundimiento del General Belgrano
Subordinación y valor
fue la última consigna
que escuchaste al embarcar
a una aventura indigna.
Pusieron en tus manos un arma
desconocida y oxidada
para defender a la patria
mientras los que dieron la orden
desconocen esa palabra.
Con una colcha raída
cubriste tu helada espalda
mientras los que dieron la orden
dormían en cama
calefaccionada.
Le pusiste el pecho a las balas
sin saber quién las disparaba
Ignorando qué hacías ahí
y hasta cuándo te quedabas.
Te mintieron y nos mintieron
diciendo que la guerra está ganada
Mientras comunicadores obsecuentes
eco se hacían de esa patraña.
Nunca llegaron las golosinas
que el pueblo mandaba
Porque quienes las distribuía
para su venta las robaba.
Podrían ser más las cruces blancas
que en las islas están
clavadas
si se hubiese demorado en dar la orden
el que vino con la palabra santa.
A quienes lograron volver
los escondimos y fueron
negados
como delincuentes comunes
como si nos hubiesen
defraudado.
Hoy rendimos sentido
homenaje
Héroe y sobreviviente
de Malvinas
que no lo olvide nunca nadie
Fuiste, sos y serás orgullo de Argentina.
Rubén de Michele
DNI: 6.432.315