A los 64 años dejó de existir ayer el exintendente de Villa María por tres períodos consecutivos Miguel Angel Veglia.
El dirigente y abogado local sufrió una descompensación mientras se encontraba realizando un trámite en Tribunales (ver recuadro) y momentos después falleció en la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Pasteur (más información página 4) a causa de un paro cardiorrespiratorio.
“Soy católico, creo en Dios. Pero en el plano terrenal, en lo único que creo es en la política. La política es la única herramienta con la que cuenta el hombre para mejorar la vida en sociedad. Aún no se ha inventado nada mejor que eso", afirmó Veglia años atrás después de dejar la Intendencia y dedicarse de lleno a su actividad profesional y a disfrutar de su familia.
Veglia nació el 15 de abril de 1950 en el seno de una familia humilde, su padre conducía un taxi y él tenía un sueño y una vocación: ser intendente. Así lo dijo en más de una oportunidad. Le gustaba ser el jefe comunal y era un apasionado del trabajo ejecutivo.
Con el retorno de la democracia en 1983, Veglia, un militante de las filas del radicalismo local, ocupó un lugar importante en el Palacio Municipal, fue el secretario general durante la Intendencia de Horacio Cabezas.
Siempre se definió como un batallador y poco ajustado a las estructuras. Ganó tres internas en su partido y tres elecciones generales. Nunca bajó los brazos.
Asumió en el Sillón de Viñas por primera vez en diciembre de 1987, fue reelecto en 1991 hasta 1995 que se presentó por tercera vez y logró un nuevo triunfo continuando al frente del Gobierno hasta 1999 en que le entregó el Sillón al justicialista Eduardo Accastello.
Polémico, trabajador incansable, amante de la política y de las bochas. Nunca anduvo a los codazos por un puesto y en los últimos tiempos tuvo un rol activo en las reuniones del comité local.
Durante su gestión fue adquirido el Palace Hotel (actual sede del municipio) se amplió la costanera hasta más de 15 kilómetros y dejó un importante legado en materia social y de salud.
Bajo su Gobierno nacieron los centros de apoyo, los dispensarios barriales, la Escuela Granja y el Centro de Asistencia a la Víctima del Delito, entre otros.
Sus restos son velados en la sala velatoria Dalí de la casa central de Paviotti y recibirán sepultura hoy a las 16 en La Piedad, previo paso por la Iglesia Catedral.
Cobertura periodística:
Textos: Nancy Musa y Sergio Vaudagnotto.
Fotos: Roberto Zayas y Victoria Araujo
Esos primeros minutos en los Tribunales
Miguel Veglia realizaba un trámite en una barandilla del cuarto piso de Tribunales junto a su colega Julio Aliciardi, cuando a las 12.35 se descompensó.
Aliciardi, que fue secretario de Gobierno durante su última gestión, lo sujetó en sus brazos y lo recostó. Rápidamente los gritos atronaron por todo el edificio en pedido de auxilio.
Los Bomberos Voluntarios anotaron su salida a las 12.38 y cruzaron la calle para asistir al exintendente. Subieron con la camilla por el ascensor. Cuando quisieron bajarlo, la camilla, acostada, no entraba en el habitáculo.
Tuvieron que cambiar de plan rápidamente para llevarlo a la planta baja sentado en una silla. Lo introdujeron en la ambulancia y emprendieron rauda carrera hacia el Hospital Pasteur, al tiempo que le practicaban maniobras de reanimación.