A lo largo de más de una hora, se trataron diversos temas relacionados con la promoción del autocultivo, fomentando la producción propia y reposicionando la agricultura en un contexto doméstico.

"Es el sistema que usaban nuestros abuelos -expresa Martinotti-, básicamente porque es totalmente natural. Vemos que en Arroyo Cabral hay un nuevo impulso con este tema, y eso es bueno".

La charla abarcó los tres conceptos fundamentales del autocultivo: fertilidad del suelo (cómo preparar la tierra), asociación (la necesidad de biodiversidad en los espacios de cultivo) y rotación (ir variando lo que se planta en cada lugar).

Martinotti también hizo alusión a las diferencias que se ven alrededor del mundo. "En Europa son habituales las huertas comunitarias. Acá, por una cuestión de idiosincrasia, estamos lejos todavía. Allá, todos se preocupan por el cuidado y la atención que requiere una plantación....".

Con un estilo claro, ameno y desestructurado, Martinotti dejó muchas enseñanzas para no sólo lograr el autoabastecimiento doméstico en materia vegetal, sino también para mejorar la calidad de los productos que ingerimos.

Luego de la disertación, se entregaron en forma gratuita plantines y bolsas de semillas provistas por el INTA.