El sodio es un metal alcalino, esencial para la vida y la buena salud. Es un mineral que el organismo no puede sintetizar y, por lo tanto, se debe obtener a través del consumo, el cual puede provenir de alimentos que tienen sodio naturalmente, alimentos y bebidas que contienen sal u otros ingredientes con contenido de sodio y de la sal que se le agrega a los alimentos durante la cocción y /o en la preparación de las comidas.
La mayor parte de la ingesta de este mineral proviene del cloruro sódico (sal de mesa común) que se añade a los alimentos.
Gran parte de la población mundial consume más sodio de lo que el organismo necesita. Las investigaciones revelan la existencia de una relación entre el alto consumo de sodio, sal, y la hipertensión, un factor de riesgo importante que puede derivar en enfermedad cardíaca, accidente cardiovascular y enfermedad renal.
La OMS/FAO recomienda un consumo medio de <5 g de sal al día (<200 mg de sodio) para prevenir las enfermedades crónicas.
El consumo diario de sal en adolescentes y adultos en nuestro país asciende a 12g por persona, lo que representa 4.800 mg de sodio, superando las recomendaciones estimadas, contribuyendo así a un factor de riesgo significativo para la salud de la población. Por este motivo se ven afectadas personas de todas las edades, incluidos los niños.
En esta página se presenta un cuadro de clasificación de los alimentos en base a su contenido de sodio.
Es necesaria la toma de conciencia sobre la importancia de reducir el consumo de este mineral, optando por alimentos que lo contengan bajo o moderado porcentaje de sodio, de este modo estaremos previniendo posibles complicaciones y mejorando nuestra calidad de vida.
Lic. Mariana Mengarelli
Nutricionista
MP 3409
Policonsultorios Amel