Un exjugador de fútbol y actual director técnico de la tercera división de Independiente de  Avellaneda fue mantenido cautivo ayer por delincuentes que le robaron su camioneta, se llevaron a su familia y los liberaron  luego de enfrentarse a tiros con la Policía.Fuentes policiales informaron a Télam que se trata de Sergio  Merlini, de 51 años y oriundo de la ciudad cordobesa de Bell Ville, quien al momento del hecho estaba acompañado por su  mujer, Mirta Ofrece (50), su hija de 21 y una amiga de ésta, de 20, porque regresaban de una reunión en la zona céntrica del partido  bonaerense de Lanús rumbo a su casa en Avellaneda.      

Todo comenzó a las 0.10 en la avenida Hipólito Yrigoyen al 3000, a metros del centro comercial Plaza Vea de Lanús, cuando los  ladrones le cruzaron a la familia Merlini, que viajaba en su  camioneta BMW X1, un Citroën C4 aprovechando que estaban detenidos  en un semáforo.      

Al técnico, que conducía el vehículo, dos delincuentes lo bajaron de la camioneta y se lo llevaron con rumbo desconocido, en tanto que otros tres asaltantes subieron a la BMW llevándose cautivas a las tres mujeres.      

Según dijeron las fuentes, todo fue observado por policías del Comando de Patrulla de Lanús, quienes realizaban tareas de  prevención y dieron el alerta a distintas comisarías que efectuaron  un operativo cerrojo para atrapar a la banda y liberar a las  víctimas. Mientras eran perseguidos, los delincuentes dispararon contra los policías y cruzaron varios barrios hasta llegar a la calle Udaondo y Coronel Santiago, donde en un pasaje oscuro y sin salida  chocaron desde atrás a un Peugeot 405 estacionado y a su vez fueron  embestidos por uno de los patrulleros que los seguía.      

El superintendente de Zona Sur II, comisario general Sergio  Gil, contó a Télam que "los delincuentes tiraron más de 14 disparos  contra los patrulleros que estaban en la persecución, lo que llevó  a un intercambio de disparos por varias calles en el barrio de  Villa Obrera".      

Tras el choque, los ladrones intentaron fugar corriendo, pero fueron detenidos, uno herido por los golpes del choque.      

Minutos después, del auto bajó el técnico, que gritaba "¡Soy la víctima, soy la víctima!" y se arrojó al piso con las manos en  la cabeza para que los policías se dieran cuenta de que no era un  delincuente.      

Una vez producidas las detenciones, los vecinos le gritaban a  los policías "¡matalo, matalo!", en referencia a los ladrones.      

En tanto, la mujer del técnico, su hija menor y la amiga  fueron liberadas por los otros integrantes de la misma banda a dos  cuadras de la Comisaría 5° de Lanús, en Villa Diamante.      

"Se bajan acá, que a dos cuadras está la Comisaría", les dijeron a las víctimas los ladrones, al darse cuenta a través de un handy que usaban que sus cómplices habían sido detenidos. Entonces,  dejaron a las mujeres, ilesas y escaparon con la BMW.      

Sobre los detenidos, Gil dijo que "se trata de un hombre  mayor con antecedentes y un menor de edad, a los que se secuestró una pistola calibre 45 y una 9 milímetros con mira láser y una caja de balas".      

Bajo las órdenes de la Fiscalía de turno de Lomas de Zamora,  efectivos de la Jefatura Departamental de Lanús analizarán ahora las diferentes cámaras de seguridad municipal y privadas para  hallar pistas de los delincuentes fugados.      

El hecho fue caratulado como "privación ilegal de la libertad, robo de automotor, resistencia a la autoridad, portación y tenencia de arma de guerra y lesiones varias".