“Seguimos apuntando alto, hacia la pobreza cero”, indicó desde Cáritas el equipo diocesano liderado por Gilda Ibal, al informar sobre la Colecta Anual de la organización.
En esta oportunidad se realizará el 7 y 8 de junio en todas las parroquias del país. Ese fin de semana los feligreses que hacen su aporte en el momento de la ofrenda saben que ese dinero será para Cáritas.
Todo lo recaudado se distribuye en la institución a nivel nacional, a nivel diócesis y en las parroquias.
Año a año, el aporte de Villa María fue creciendo, lo que le permite a la entidad solidaria avanzar en más proyectos sociales.
Actualmente, Cáritas Diocesana tiene varias áreas que sostiene con el trabajo de profesionales y voluntarios que aportan su dedicación: está el área de Viviendas, comandada por David Ruiz, que ya tiene 800 casas construidas: el de Educación No Formal, con fuerte presencia en los barrios para brindar contención a pibes de diferentes edades; las residencias universitarias, que posibilitan a unos 60 chicos de la región estudiar en Villa María a bajo costo de estadía y el sector de Economía Social, donde realizan capacitaciones y entregan microcréditos para emprendedores que buscan una alternativa de ingresos.
El lema de este año es “compartir es amar”. Oscar Vicente Ojea, obispo de San Isidro y titular de Cáritas Argentina, señaló que el lema está vinculado a la frase de la Madre Teresa, cuando le preguntaron sobre el fin del hambre en el mundo. Ella aseguró que terminaría cuando “tu y yo aprendamos a compartir”.