Un concurrido boliche ubicado en ruta 4 no tiene habilitación del municipio para funcionar pero igual lo hace.
La disco “Fénix”, conocida por ser el único reducto alternativo de la zona, no tiene autorización para desarrollar su actividad, según confirmó el titular de Seguridad Ciudadana, Fabián Pastorak, a EL DIARIO.
El funcionario dialogó con este matutino sobre diversos temas y admitió que el citado boliche incurrió en distintas infracciones, como la falta de personal de seguridad. “Todo lo actuado por los inspectores de esta área fue informado a la Justicia” de Faltas, indicó Pastorak. “No he tenido información respecto a que ya se encuentre habilitado”, añadió.
La revelación del funcionario causa curiosidad porque la confitería no pasa desapercibida. Además de funcionar en un amplio inmueble, tiene una clientela cautiva. Durante mucho tiempo se llamó “VQV”, hasta que cambió de dueño y de nombre.

Buscan el 2 x 1

Pastorak precisó, ante preguntas de este cronista, que Aruba -a metros del puente Núñez- tiene permitido la asistencia de alrededor de 650 personas, Ciro -debajo del puente Alberdi- similar cantidad y Quinoto -histórico pub situado en ruta 2 - un poco más. “Son entre 500 y 800 personas por boliche”, puntualizó. “Generalmente están al límite de la capacidad permitida y han incurrido en infracciones por superarla, aunque consensuando con los empresarios hemos conseguido que la respeten regularmente”, señaló.
Villa Nueva permite una persona por metro cuadrado, a diferencia de la mayoría de otras localidades que permiten dos personas por metro cuadrado. Los propietarios de los pubs pelean por el aumento de la capacidad autorizada.
Pastorak comentó que hay tres inspectores municipales en cada local y hay varios que recorren el conurbano.
Sobre la falta de controles de alcoholemia, informó que desde marzo o abril comenzarán a implementarlos. “A veces parece sencillo, pero lleva un proceso de aprendizaje por parte del personal que se encargará de los mismos”, explicó.
El área realiza tareas de prevención, educación y constatación de infracciones, pero no aplica multas, algo de lo que se encarga el Tribunal Municipal de Faltas.
El funcionario dijo que hubo un crecimiento de la afluencia de jóvenes en la noche villanovense, provenientes de la ciudad, Villa María y pueblos de la región y consideró que “se sienten con mayor seguridad y protección”.
“Hemos consensuado con los empresarios distintas medidas. Antes no tenían personal abocado a la seguridad, ni privado, ni policías”, aseguró.
La zanja de calle Santa Cruz: Sobre el asunto publicado en página 7 de la edición de ayer, Pastorak dijo que la ciudad tiene un móvil abocado a la seguridad ciudadana “casi las 24 horas”, que advirtió la presencia de la zanja, “la que es peligrosa para la vida humana”; detalló las medidas que tomó el área (tal como se informó en la víspera) y explicó que fue informado a Obras Públicas, la que “ya está trabajando en consecuencia”.