Los propietarios de boliches y otros locales de espectáculos públicos de Villa Nueva recibieron ayer una buena noticia: ya no tendrán que conseguir el aval del vecindario para funcionar todos los años, porque la ordenanza sobre la temática dejará de exigir ese requisito. Lo consiguieron sólo por los votos de los concejales del oficialismo. Las minorías no acompañaron la propuesta que había llegado desde la Secretaría de Gobierno, con la firma de su titular Natalio Graglia y del subsecretario de Seguridad Ciudadana, Mauro Bizzarri.
La semana pasada, la iniciativa de necesitar el consentimiento de los vecinos solo y por única vez en la primera habilitación (y no todos los años) tomó estado parlamentario y la presidenta de la bancada de Unión por Córdoba-Frente para la Victoria, Nuri Vélez, pidió su tratamiento sobre tablas. Los radicales, especialmente Javier Pérez, demandaron el pase a comisión para su estudio, aunque expresaron que consideraban que había que tener en cuenta la inversión hecha por los dueños de estos emprendimientos de diversión. Por su lado, Jorge Heredia, del Frente Cívico, había sugerido que el aval vecinal se requiriera, por ejemplo, cada cinco años, para que los empresarios amorticen sus inversiones y los habitantes tengan la posibilidad de dar su parecer cada cierto tiempo.
La proposición oficial quedó en estudio y finalmente ayer se votó, en la tradicional sesión semanal del órgano legislativo. Así, sólo los oficialistas dieron luz verde al tema, mientras que Heredia reiteró su idea del miércoles anterior.
Por su lado, los ediles de la Unión Cívica Radical, Javier Pérez y Nora Bizzutti, rechazaron de plano la nueva legislación.
“En primer lugar, las leyes no son retroactivas”, remarcó Pérez al dialogar con EL DIARIO tras la sesión. “Los vecinos que firmaron a favor de la habilitación de un local, lo hicieron con la convicción de que si los dueños de estos emprendimientos no cumplían con ciertos puntos, al año siguiente podían revocar el compromiso”, subrayó. Hizo alusión a, por ejemplo, ordenamiento del sector, limpieza y hasta iluminación en algunos casos.
“Con esta nueva legislación, le coartás al ciudadano la posibilidad de que si el bolichero no cumple, pueda emitir su parecer”, advirtió.
El legislador local agregó que “se trabajó durante mucho tiempo en la elaboración de una ordenanza de espectáculos públicos”, la que fue sancionada recientemente, “y ahora no sé por qué motivo hay que hacer una modificación”.
Consideró que “si bien es cierto, como dijimos el miércoles anterior, que los propietarios realizan una gran inversión, su incursión en el rubro viene acompañada por derechos y deberes”. “Ahora le cambian las reglas del juego a la gente”, señaló.
En tanto, interpretó que tendría que existir un sector exclusivo para estos emprendimientos, “para que no afecten la normal convivencia con los vecinos”. “Las dos ciudades (Villa Nueva y Villa María) ya han quedado grandes y se necesita un espacio para boliches”, dijo.