Un albañil villamariense fue condenado ayer a tres años de prisión efectiva por tenencia de marihuana, pero como se encuentra detenido desde el 1 de marzo de 2013, quedó a un paso de obtener la “libertad condicional”.
Al cabo de un proceso oral y público que comenzó la semana pasada en la Cámara del Crimen de Villa María, Rubén Mario Tosoroni, de 39 años de edad, fue declarado autor responsable de “tenencia simple de estupefacientes”, un delito que es reprimido con prisión de uno a seis años.
En rigor de verdad, Tosoroni llegó a juicio acusado de “tenencia de estupefacientes con fines de comercialización” y “comercialización de estupefacientes”, y si era declarado culpable bajo esa calificación legal, recibiría una condena de entre cuatro y 10 años de cárcel.
En la víspera, al pronunciar su alegato, el fiscal Francisco Márquez solicitó una pena de cuatro años por considerar que el trabajador de la construcción había comercializado la citada droga en su domicilio de barrio Felipe Botta, pero subsidiariamente pidió la sanción finalmente impuesta (es decir, tres años), para el caso de que el juez considerara que se había tratado de un caso de tenencia simple.
A su turno, la asesora letrada Silvina Muñoz reclamó la absolución y la inmediata libertad de su defendido luego de sostener que se había tratado de un caso de “tenencia de estupefacientes para consumo personal”. No obstante, y también en forma complementaria, pidió el mínimo de la pena (un año), para el caso de que se considerara que había cometido el delito de tenencia simple de drogas.
Finalmente, el camarista Félix Martínez coincidió con los planteos subsidiarios de ambas partes, aunque terminó imponiendo la condena requerida por el acusador público.
Como Tosoroni lleva más de ocho meses entre rejas (el domingo se cumplirán 15 meses), está en condiciones de obtener la “libertad condicional”, trámite que se cumplirá la semana venidera, una vez que se realicen los trámites administrativos de rigor.