A un mes desde que se puso en vigencia en la ciudad la nueva tarifa de taxis, choferes y dueños aseguran que el impacto de esta medida ha sido negativa.
“Estamos haciendo menos viajes”, sentenció Daniel Vidal, titular del gremio de choferes de taxis, desde el 1 de mayo, día en que comenzaron a regir las nuevas tarifas, que contemplan una bajada de bandera diurna que pasó a costar de $8 a $9,50 y la aparición de la figura de la bajada nocturna en $10,90.
No dudó en afirmar que “este aumento no rindió” y explicó que “lamentablemente seguimos en la misma situación, se sabe que hay una crisis generalizada a nivel país, pero la gente toma menos taxis y a nosotros subir la tarifa no nos benefició”.
Vidal remarca, sobre todo, que la disminución en el número de pasajeros fue aún mayor durante el horario nocturno (de 23 a 6). “Principalmente se notó en el turno noche. Tenemos choferes que están haciendo 300 o 400 pesos brutos en una noche, de ahí tenés que sacar todos los gastos y con suerte te quedan 100 o 120 pesos. No termina de convenir andar toda la noche en la calle, con el peligro que significa, para esa recaudación”, explicó.
Según el titular del gremio de choferes, “se hace la misma plata, por el aumento, pero con muchos menos viajes”, por lo que, en definitiva, “ganamos lo mismo o menos que antes del aumento o que hace un año atrás”, por ello es que plantea: “¿De qué sirvió el aumento entonces?”.
Vidal ejemplifica con dos situaciones concretas dónde es que se percibe mayormente una reducción de pasajeros desde que la Cámara de Permisionarios y concejales dieron visto bueno al aumento: “En los días de lluvia, la gente sí o sí tiene que tomar el taxi y este mes ha sido muy irregular. Además, antes remontábamos un viernes o sábado porque se trabajaba mejor y los jueves eran días fuertes, en los que se trabajaba bien, pero ahora pasó a ser un día común”.
En ese sentido también se expresó Juan Martínez, chofer que ayer se encontraba en la Terminal aguardando por pasajeros: “Mirá la cola de taxis que hay esperando gente, antes la Terminal no estaba tan llena de vehículos”.
Martínez considera que “el aumento nos perjudicó” y expuso que “se notó que la gente camina más, sobre todo en la última semana, por ser fin de mes”.
Metros más allá, dos choferes que prefirieron no dar sus nombres -“sólo poné que soy dueño de taxi”, dijo uno- señalaron a una persona que salía de la Terminal acarreando su valija y opinaron: “La Terminal y el centro siempre fueron las zonas donde más se trabaja, pero ahora es notorio ver cómo la gente va caminando por el bulevar y no se sube a un vehículo cómo antes. Esa gente se tomaba un taxi”.
“Aumentamos la tarifa, los viajes disminuyeron y subieron los costos de mantenimiento del auto y del combustible, entonces así los números no van a dar nunca”, cerró uno de los choferes.