El pasado domingo EL DIARIO publicó un informe en donde Daniel Vidal, titular del gremio de choferes de taxis, expresaba su preocupación por la merma en el trabajo de los choferes, desde que el 1 de mayo comenzó a regir en la ciudad una nueva tarifa, con bajadas de bandera de $9,50 (de día) y de $10,90 (en horario nocturno).
En esa nota Vidal señaló, entre varios aspectos, que desde que rige el incremento tarifario “estamos haciendo menos viajes”, “este aumento no rindió” y “la gente toma menos taxis y subir la tarifa no nos benefició”.
Ese análisis fue apoyado por algunos choferes consultados por este matutino y desde la Asociación Civil de Permisionarios de Taxis de Villa María la respuesta no tardó en llegar. Mediante un comunicado expresaron que “el análisis realizado por el Sindicato de Choferes de Taxis resulta de una visión pobre desde dos puntos de vista. Por un lado, endilgarle el poco trabajo al aumento de tarifa es mirar el problema desde una óptica muy reducida”.
“Por el otro, manifestar que los permisionarios tampoco estamos conformes es desconocer el origen de la petición realizada al Concejo Deliberante”, añadieron.
Del mismo modo recordaron que “los propietarios de los vehículos de alquiler, reunidos en plenario y por mayoría de los presentes, decidimos realizar un paro si no se restablecían los costos mediante un reajuste reparador”.
“La merma de trabajo fue producida exclusivamente por la abrupta crisis económica sobrevenida en mes de enero, con la devaluación monetaria y la gran hiperinflación de nuestro país”, analizaron.
Seguidamente la Cámara de Taxistas local aseguró que “antes de enero los choferes de taxis debían realizar el doble de viajes que hoy para lograr la recaudación actual. El aumento de la bajada de bandera y el establecimiento de la tarifa nocturna no hicieron otra cosa que recomponer el salario del trabajador del volante, que era quien anteriormente se encontraba más afectado”.
“En la actualidad se deben realizar menos cantidad de viajes para obtener una retribución equitativa”, opinaron.
Por otra parte aseguraron que “en lo único que se beneficia el permisionario es en un menor desgaste del vehículo, ya que en lo demás los porcentajes de distribución de gastos sigue siendo los mismos, mientras que hoy el chofer tuvo un incremento de entre el 12% y el 15% en su jornal diario”.
Finalmente, en un llamado a la reflexión, expresaron que “desde el punto de vista sociológico, cuando se pretende efectuar un análisis social el mismo debe realizarse dentro de un contexto histórico, social y económico, y no de manera aislada. De lo contrario caemos en conclusiones equivocadas, ya que partimos de premisas erradas”.
“Para ello cabe destacar que, si leemos los diarios, nos encontramos que en todos los ámbitos y rubro ha habido una importante baja en los consumos generales de elementos básicos, como por ejemplo los lácteos que sufrieron una disminución del 30% en su consumo”, graficaron.