Desde el año 2011, la Universidad Nacional de Villa María, a través del Instituto de Ciencias Básicas y Aplicadas, dicta la carrera de Licenciatura en Ambiente y Energías Renovables, una oferta educativa inexistente e inédita a nivel país al juntar ambas problemáticas en una carrera de grado.
El correr de los años ha demostrado que el interés de los estudiantes sobre esta asignatura ha ido en aumento, pero sobre todo, porque las políticas ambientales juegan un rol cada vez más importante a nivel político y social.
Así lo explica Luis Tuninetti, docente de la carrera que el año próximo podría tener sus primeros egresados. “La faceta ambiental y energética va a ser esencial para que los gobiernos, cualquiera sea su nivel, puedan administrar sus recursos”, destacó y comentó que “las políticas ambientales están jugando un rol preponderante a la hora de la decisión de empezar o no algún emprendimiento”, por ello es que considera que el futuro de los egresados de la carrera es prometedor: “Creo que desde el sector público ya hay muy buenas perspectivas y se está viendo la necesidad de profesionales que gestionen la cuestión ambiental y energética porque, lamentablemente, las perspectivas en general con los temas de cambios climáticos y contaminación marcan que no vamos bien, todo eso hace que haya más necesidad de profesionales ambientales”.
De los primeros inscriptos a la carrera, sólo quedan siete alumnos que hoy están en cuarto año y con vistas a iniciar la etapa de tesis. “Esperamos que promediando el año que viene podamos tener la primera promoción de egresados”, auguró. A partir de allí, el crecimiento en la currícula, asegura, fue sostenido, “este año tuvimos 42 inscriptos de los cuales hoy quedan unos 30 que continúan la carrera”.
Al ser la única opción de este tipo a nivel nacional, la Licenciatura en Ambiente y Energías Renovables ha captado alumnos de todo el país. “Tenemos alumnos hasta de Ushuaia. Uno cuando empieza a dar clases les pregunta a los alumnos de afuera si vinieron acá por otra cosa y terminaron estudiando esto, y te cuentan que no, que se vinieron exclusivamente a estudiar la licenciatura”, cuenta quien es docente de Introducción a Ambiente y Energía, en primer año.
“Es una carrera muy novedosa a nivel nacional dado que integra la cuestión ambiental y energética. Los chicos constantemente ven las dos fases de una problemática que históricamente se abordaron por separado”.
La interacción entre los alumnos y la ciudad es permanente. “Hay casos muy interesantes”, asegura y detalla: “Hemos tenido la sanción de una ordenanza municipal sobre techos verdes que surgió del trabajo de un alumno; hay grupos que están trabajando en el algarrobal, que es el espacio verde que tenemos pegado a las 400 viviendas, para preservarlo y aprovecharlo; hemos estado haciendo trabajos con respecto a la protección de la cuenca hídrica también, entre otras cosas”.
Esto no es casualidad, desde su nacimiento, “siempre trabajamos para que la carrera tenga una transferencia constante hacia la sociedad”, resalta, y hace hincapié en que “que los alumnos transfieran lo aprendido a la sociedad villamariense es el principal lineamiento”.