Escribe Federico Gazzoli
Cuando culminó la etapa clasificatoria y se conoció que en cuartos de final del Torneo Apertura de la Liga Villamariense Alem de Villa Nueva debía enfrentarse nada más y nada menos que con Atlético Ticino, último campeón del fútbol local y con una larga racha de partidos invictos, pocos imaginaban lo que terminó de concretarse ayer por la tarde. Es que por la revancha de esa serie, el “León” empató ayer sin tantos en tierras ticinenses y con la victoria que obtuvo el anterior domingo en su cancha por 1 a 0 terminó consiguiendo el pasaje a una de las semifinales, donde deberá chocar con su rival de toda la vida, Alumni de Villa María.
En la previa de este cotejo se preveía que pasaría lo que finalmente sucedió durante la mayor parte de los 90 minutos, con un dueño de casa decidido a ir en busca de la victoria, intentando como siempre practicar un fútbol prolijo ante una visita que apostaría a jugar el partido con el cuchillo entre los dientes e intentando cortar en la mitad de cancha los circuitos futbolísticos de su rival.
Y en ese panorama lo que prevaleció fue la garra villanovense, frente a un conjunto dirigido por Germán Vicario que lejos estuvo del nivel que lo llevó a ser protagonista en los últimos campeonatos y, para colmo de males, las pocas situaciones de riesgo que generó en ofensiva las terminó definiendo de mala manera.
La primera chance en ofensiva llegó por el lado de Alem a los 17’, con Nicolás Pedernera abriendo la pelota hacia la derecha para que desde allí José Ledesma enviara un centro que cabeceó incómodamente Martín Porporatto y murió en las manos de Diego Fantino.
El dueño de casa respondió un par de minutos después, mediante un tiro libre realizado por Lucas Damiani que Julio Giraudo atrapó contra el poste derecho, pero Alem no se quedó atrás y a los 21’ obligó a Fantino a despejar un derechazo que Pablo Fernández ejecutó en una jugada a balón parado.
En una etapa inicial con escasas emociones, Atlético Ticino contó con la más clara de ellas a falta de pocos minutos para el cierre. Tras remate de Waldemar Carranza, la defensa de Alem no rechazó una pelota que le quedó a Matías Piovano, quien increíblemente solo en el corazón del área definió por encima del travesaño.
Para la etapa complementaria los de Ticino salieron a jugar sabiendo que ya habían desperdiciado 45’ valiosos en su afán de revertir la serie a su favor y así fue que se adelantaron algunos metros en el campo de juego. Así, a los 6’, entrando al área por la izquierda Elías Acosta metió un zurdazo que Cristian Agosto despejó al córner arrojándose al piso para cubrir un arco que estaba vació producto del adelantamiento de Giraudo.
Pero la desesperación local generó que dejara muchos espacios mal cubiertos en sus metros finales, permitiéndole a Alem generar peligro mediante la vía del contragolpe. Primero, a los 16’ desde la medialuna Nicolás Pedernera definió arriba del larguero y un minuto después Fantino envió al saque de esquina un peligroso derechazo de Fabián Martínez.
Ese fue el momento más crítico de la tarde para el dueño de casa, que gracias a su arquero no sufrió un gol de Alem, hecho que habría comenzado a definir la historia rápidamente de manera adversa. A los 20’ el uno tapó mano a mano con Porporatto y a los 23’ sacó al córner con una magnífica volada, un derechazo de José Ledesma.
Con pocos minutos por jugar, la meta del Atlético era al menos conseguir un tanto para estirar la definición a la agónica historia de los penales. Iban 49’ cuando de espaldas al arco el ingresado Leandro Freytes la jugó al punto penal, donde entrando por el punto penal Francisco Santunione definió por arriba del travesaño y así dejó pasar la última chance que su equipo tuvo para soñar con las semifinales.
Clasificó Alem, un equipo que no propone demasiado desde lo futbolístico, pero que con su garra característica y contra varios pronósticos que lo veían afuera ya está metido entre los cuatro mejores clubes del campeonato. Ahora enfrentará a Alumni, en lo que será una nueva página con mucha historia dentro del fútbol local.
La figura
Pablo Fernández
Aportó un trabajo fundamental en la mitad de la cancha junto a Nicolás Pedernera, para cortar los circuitos de juego de Atlético Ticino. En el local el mejor fue Fantino, con buenas atajadas y jugando por momentos como líbero para solucionar los problemas de una defensa que no tuvo una de sus mejores tardes.
El árbitro
Pablo Echavarría
Regular arbitraje del referí cordobés. Siguió de cerca cada jugada y acertó en las faltas, pero le faltó sacar más amarillas y permitió que le hablaran demasiado, sobre todo desde los bancos de suplentes.