Fue un verdadero clásico, con todos los condimentos que un partido de este tipo puede presentar. Con goles, un buen marco de gente, un partido intenso y muchas piernas fuertes, el 1 a 1 entre Alem y Alumni dejó todo abierto para que una de las semifinales de la Liga Villamariense de Fútbol se defina el próximo domingo.
Al igual que los otros dos partidos del torneo, el cotejo entre los de Villa Nueva y Villa María terminó igualado. Con el Albirrojo cerca de la victoria, con el Tricolor reaccionando para recuperarse y con un final para el infarto que pudo tener más goles.
Bronca en Alumni, porque después de estar casi una hora arriba en el marcador, se le escapó otra vez un triunfo. Y algo de alivio en Alem, ya que de local no podía encontrar el camino y Martín Porporatto le dio el oxígeno necesario para la revancha.
Claro que el primer tiempo fue todo rojo y blanco, ya que el gol de Facundo Depetris le entregó la tranquilidad necesaria como para desarrollar una etapa comandando las acciones desde todo punto de vista.
Alem fue un equipo en los primeros quince minutos, jugando en campo contrario y disponiendo del balón. Y otro totalmente diferente después del gol villamariense. De ahí en adelante, los nervios cegaron al “León”, que volvió a ser ese equipo inofensivo, sin ideas, con más piernas fuertes que toque de pelota.
Todo por culpa de un tiro de esquina que ejecutó Leonel Strumia, peinó en el primer palo Nicolás Ponce y empujó de cabeza en el segundo, “Facu” Depetris para el 1 a 0 de Alumni.
Esto potenció a la dupla Strumia - Ramírez en la mitad de cancha, ayudado por un gran aporte de Patricio Peñaloza por la banda derecha.
Alem no podía. Nervioso, chocando constantemente contra el rival, sin conexión con sus delanteros, los dirigidos por Gabriel Márquez casi no remataban al arco de Nicolás Oro. Ni Pablo Fernández ni Jorge Pedernera entregaban el pase limpio para que los demás jueguen.
Por ende, Alumni recuperaba con sus volantes y salía rápido para buscar más chances de gol. Podría haber aumentado el marcador con una gran jugada que finalizó con un remate de Strumia y otro de Peñaloza (24’). En ambos casos fue Cristian Agosto quien despejó de manera épica desde la línea del arco de un Julio Giraudo ya abatido.
Así se fue la primera etapa, con Alumni jugando ante un Alem casi perdido desde lo futbolístico y desde lo psicológico. Y el partido le entregaba un mensaje claro al local. Que peleando no iba a encontrar soluciones. Tenía que jugar o jugar.
Ya en el complemento la historia comenzó diferente, porque se vio otro Alem, más que nada en los primeros 25 minutos. Ahí fue cuando el local tomó las riendas del partido, se olvidó de pelear y empezó a arrinconar al visitante, con la tenencia del balón.
Alumni se fue retrasando peligrosamente para entregarle el comando del partido al “León”. Porque la defensa local la recuperaba más limpia, el medio encontraba juego y los delanteros sentían mucho más la pelota. Mucho más aún con los ingresos de “Maxi” Le Roux y Ricardo Juárez.
El conjunto dirigido por Gustavo Miranda ya defendía con cinco defensores, por el ingreso de Coria por Gayoso, dejando a Federico Depetris como única referencia ofensiva.
Y Alem empezó a aproximarse. Acosta jugó, Porporatto remató y tapó Oro (12’). En la siguiente, otra vez Diego Acosta, pero en este caso para el disparo de Le Roux, que salió por sobre el horizontal.
No obstante, al gran momento del local, Alumni pudo haber aumentado el marcador con un par de jugadas claras. La primera, fue para el derechazo de “Nico” Gayoso, desviado. Y la otra nítida, un minuto antes del empate, con Ramírez asistiendo a “Fede” Depetris y el travesaño diciéndole que no al derechazo del nueve.
En la jugada siguiente llegaría el empate de Alem. Con una gran aparición de Martín Porporatto, aguantando la pelota dentro del área para rematar de media vuelta, con un disparo pegado al palo izquierdo de un Oro que nada pudo hacer (26’).
El 1 a 1 dejaba veinte minutos para el infarto. El local, agrandado por el empate y el visitante algo perdido por el difícil momento que le tocaba vivir.
Aunque a decir verdad, los dos tuvieron chances como para ganarlo, pero quien más cerca estuvo fue Alumni con un cabezazo de Coria, más una doble en el minuto final, que tuvo frentazo de Juan Salort en el travesaño y en el rebote, remate de “Fede” Depetris que Agosto despejó nuevamente sobre la línea del gol. Increíble, pero real.
Antes de esto, Le Roux tuvo un remate para el 2 a 1, pero Oro, de gran actuación, atenazó para la igualdad final.
Ahora se verán las caras en seis días, seguramente en Plaza Ocampo, para ver quién sigue y quién se queda a mitad de camino. Por ahora, la serie está para cualquiera.
La figura
Gastón Kranevitter. Fue una muralla en la última línea de Alumni. El juvenil defensor mostró mucha actitud para llevar adelante un partido muy “chivo”. Ganó siempre de arriba y por abajo también. En el local, Cristian Agosto salvó en la línea tres jugadas que tenían destino de gol.
El árbitro
Eduardo Rodríguez. Tuvo nuevamente un arbitraje bajo, con un primer tiempo lleno de dudas y un complemento más certero en sus decisiones. Dejó pasar muchas infracciones de amarilla, por ende se dio un juego bastante violento.
El dato
Alrededor de 800 personas se acercaron ayer hasta la “Leonera” a observar el clásico, que le tocó un espléndida tarde tipo “primaveral”. Mañana se programa la revancha, que sería en Plaza Ocampo, que tendría un doble partido el próximo domingo.