En febrero de este año, las autoridades municipales informaron que no renovarían el contrato al joven Sergio Andrada. Sus padres, Carlos Andrada y Ana Rodríguez, entendieron que el despido había sido un hecho discriminatorio por tratarse de una persona con discapacidad. Por ende, presentaron formalmente la denuncia ante el INADI, que también tomó el descargo que presentó el intendente Jorge Yamul.
El mandatario sostuvo que “fue una más de las personas a las cuales no se les renovó el contrato a fines de febrero debido a la emergencia económica”. La familia de Sergio resolvió presentar un recurso de amparo en los Tribunales de Río Tercero.