"Mientras no estén homologados, no tienen legalidad", sentenció Nancy Schiavi, intendenta de Tío Pujio, uno de los municipios apuntados años atrás como de los que a través de este sistema de fotomultas se dedicaba a recaudar. Un verdadero estigma que cargaron varias comunas en el territorio provincial.
A poco de asumir, Schiavi y su equipo tomaron la decisión de retirarlos. "Decidimos retirar los semáforos con cámara porque no había prevención, sino recaudación, pero tampoco se notaba cuánto en realidad. Y si hubo recaudación, no se notó, así que pedimos no renovar contrato con la empresa".
"Como salida, como alternativa, encontramos que podíamos anexar a los semáforos comunes el colocar conos sobre la ruta en los pasos peligrosos, como la esquina de calle Montevideo donde se ubican la sede de la Cooperativa de Energía y el Centro Cívico, y un agente en determinados horarios nos ayudaba más a prevenir. Ese fue el cambio que hicimos por los semáforos y ayuda a que se deje de ver como una política de recaudación", explicó la intendenta.