“Leímos con mucho respeto las declaraciones del intendente acerca de las cantidades de empleados precarizados que trabajan en diferentes reparticiones y lamentamos que no conozca al dedillo las condiciones de trabajo de los municipales. Le invitamos a debatir públicamente los datos acerca de los empleados que no están debidamente registrados en el municipio local. En más de una oportunidad le pedimos audiencia para informarle acerca de la realidad de los empleados, pero sólo nos contesta por los medios. Creemos que no debemos ponernos nerviosos y ver cómo entre todos mejoramos la realidad de los trabajadores municipales. Aunque algunos jefes nos hacen echar de las reparticiones, como es el caso del excomisario Daniel Ferreyra, que nos hizo sacar con la Policía en un gesto de autoritarismo intolerable, conocemos bien la cantidad de compañeros que están precarizados ya sea como facturantes, contratados desde hace años, becarios, etcétera. Si bien tenemos los listados, trabajadores estamos recorriendo las reparticiones y relevamos bajo qué condiciones trabajan los compañeros. Los datos son los que surgen de la realidad y, como dijo alguien importante en política, “la única verdad es la realidad”. Le ofrecemos las planillas de información que construimos con las personas que trabajan en cada lugar, la función que cumplen y el tipo de relación laboral.
Insistimos, si el intendente no tiene los datos y ya que nunca nos respondió los pedidos de audiencia, le convocamos a debatir públicamente acerca de las condiciones laborales de los municipales. Incluso podríamos hablarle de otras cosas que son de interés de los empleados, como la necesaria derogación del articulado discriminatorio de la ordenanza que fija el Estatuto del Empleado Municipal, mediante los cuales se le restan derechos a trabajadores que ingresaron a partir de 2006. También aprovechamos para pedirle que pasen a planta permanente a todos los empleados y de manera inmediata a aquellos que están en los órdenes de mérito que se armaron luego de cada examen de ingreso y hace años están esperando.
Por otra parte, le decimos que como gremio tratamos de construir una relación seria con las autoridades municipales y que nada tenemos que ver con las lucha entre partidos o internas. Que esos planteos son para desviar la discusión real, que es la precarización laboral. Las chicanas quizás surgen porque no quieren mirar la realidad. Sí nos vemos en la obligación de decir, respetuosamente, que cuando el recientemente fallecido Miguel Veglia en 1999 dejó la intendencia no nos debían dos meses y aguinaldo como se dice. Sí el municipio sufría una crisis y los atrasos eran habituales, que recién el 17 de noviembre de 1999 los empleados jerárquicos cobraron sus sueldos de octubre. Los de categorías inferiores habíamos cobrado antes. Nosotros somos empleados y tenemos diferentes colores políticos, no entramos en esas discusiones políticas, pero tampoco quieran contarnos nuestra propia historia. Allí están los diarios para ver y consultar y, si eso es poco, alguna contadora cercana a jefe comunal era veglista en ese tiempo. Señalamos esto porque quizás se confundan, dado que algunos de los integrantes de la Unión de Trabajadores de Estados Municipales (UTEM) supimos hacerle paros importantes a Veglia. Le hicimos los reclamos correspondientes, pero no queremos difamarlo. Incluso recordamos que cuando Accastello estaba por asumir abrigamos muchas esperanzas, aunque entonces manteníamos grandes diferencias con su orientación política expresada en los abrazos y asados que días antes compartía con Carlos Menem. Incluso nos gustó cuando inició su mandato tratando de disminuir la cantidad de funcionarios y llamando a gente de diferentes partidos para integrar su equipo de Gobierno. Estamos decididos a recuperar esas esperanzas, pero es necesario regularizar la situación de los trabajadores municipales que no sólo cobramos sueldos muy bajos, sino que tenemos un gran porcentaje de compañeros precarizados. La discusión es acerca de las condiciones laborales de los empleados municipales. La precarización no puede ser justificada desde ningún marco ideológico democrático y para que una gestión municipal sea exitosa debe tener en orden la relación con los empleados. Nuestro gremio no se guía sino por sentir profundamente nuestra condición de trabajadores y la necesidad de que se nos respeten nuestros derechos. Incluso expresamos públicamente reconocimiento a los avances que en algunas áreas ha significado el Gobierno municipal de los últimos años, pero, insistimos, eso no puede dejar de lado la discusión por los derechos de los trabajadores. Estamos convencidos de que la actual realidad de los empleados municipales tiene remedio, pretendemos sumar nuestro esfuerzo, capacidad de diálogo y trabajo para el éxito de la gestión en relación a este tema”, concluyó Chirino.