"Es un año difícil para los productores lácteos. Lo pueden ver todos, porque sólo en la región se remata un tambo cada 15 días”, dijo Diego Manavella, presidente de la Cámara de Productores Lecheros de Córdoba (Caprolec).
El escenario desalentador se debe a razones comerciales y climáticas. “Lo que nos duele es que siempre fuimos partidarios de solucionar los problemas desde el diálogo y no entendemos por qué en esta oportunidad no nos dan ninguna respuesta”, dijo.
Aclaró que tienen “muy buena relación y contacto permanente” con el subsecretario de Lechería de la Nación, Arturo Videla. “Pero nos parece que el problema viene de más arriba”, aseveró.
“No entendemos, porque el mismo (Carlos) Casamiquella dijo al asumir que iba a trabajar puntualmente con todas las cadenas productivas. Pero a nosotros no nos reciben”, dijo.
Los productores plantean la necesidad de una intervención positiva del Estado “porque por lo perecedero de nuestro producto, no estamos en condiciones de negociar condiciones justas de comercialización con la industria”.
Costos
Asegura que hoy, el costo para producir el litro de leche está en 3,40 pesos. “Deberíamos cobrar 3,60 a 3,70 pesos, que es además lo que la industria está en condiciones de pagar, pero inexplicablemente hasta el jefe de Gabinete (Jorge Capitanich) sale a decir que está bien que nos paguen tres pesos. Creo que el lobby que puede hacer la industria es muy fuerte”, puntualizó.
Entiende que este desfasaje de costos-precio está llevando al quebranto a muchos productores lecheros. “El año pasado se perdió el 2,5% de los tambos. Creo que no estoy equivocado en señalar que en 2014 será mucho peor”.
“Mientras tanto, la industria pidió un tipo variable de cambio y lo consiguió a principio de año. Pero nosotros no vimos nada. Tampoco vimos nada de los cinco mil dólares que valía la tonelada de leche en polvo en enero”, agregó.
¿Y la calidad?
En el mismo sentido, Manavella señaló que uno de los anhelos de todos los actores de la cadena láctea fue el pago por calidad. “Sin embargo, son muy pocas las industrias que lo cumplen. Eso nos lleva a una contradicción porque los productores más chicos, que producen leche de más calidad y en consecuencia tendrían que estar cobrando más, terminan cobrando menos. Nadie hace cumplir esa normativa”, planteó.
Inundados, sin ayuda
Otra complicación planteada desde Caprolec tiene que ver con las razones climáticas que hacen más adverso el panorama para los lecheros.
Puntualmente, planteó el tema de los tambos que quedaron bajo el agua, indicando que “pese a los promesas, nadie recibió ninguna ayuda. Te imaginás que es imposible recuperar las pasturas en dos meses y esa gente no tiene otra que salirse de la actividad”, señaló.
“A lo mejor están trabajando, pero no se, ya estamos a la mitad del año y todavía no hay respuestas a ninguno de nuestros reclamos”, concluyó el dirigente lechero.