A raíz de un proyecto de ordenanza presentado por la concejala de la Unión Cívica Radical, Nora Bizzuti, para utilizar pilas en obras de asfaltado se generó la polémica.

Si bien la propuesta tiene un fundamento ecologista, los vecinos de barrio San Antonio fueron los primeros en reunir unas 170 firmas para evitar que se lleve a cabo esta iniciativa. Estas se presentarán ante el municipio villanovense, el Concejo Deliberante y el Gobierno provincial.

Ahora se sumó la organización Eco-Sitio, en la voz de Luis Tuninetti, para dar su punto de vista, también en contra.

El docente universitario aclaró que "no conozco aún el impacto que esta práctica podría tener, porque pedimos los paper científicos, es decir, antecedentes de investigaciones y no los recibimos. Como así tampoco el proyecto de ordenanza".

Cabe aclarar que hace unas pocas semanas Bizzuti presentó la idea en el Concejo Deliberante de Villa Nueva y aún no ha sido sancionada como ordenanza. 

Pero hace unos días apoyó su propuesta con la palabra del ingeniero jubilado de la Universidad Tecnológica Nacional de San Francisco, Edgardo Benvenuto, que indicó que habría que emplear cada 100 litros de hormigón un litro de pilas.

Se explayó sobre este punto diciendo que "pedimos saber sobre los científicos y técnicos porque hay gran incertidumbre y, si bien el científico (por Benvenuto) dijo que esto se está aplicando en otras partes del mundo, nosotros no hemos obtenido registros de que se implemente en otra ciudad".

Sólo habría un plan llamado Ecopilas, donde se utilizan para crear bancos o mesas en plazas, pero quedarían muy expuestas a dañar la salud.

Tuninetti comentó a EL DIARIO que se reunió con los vecinos que juntaron las firmas y todos tienen las mismas dudas en cuanto a quién va a auditar la obra y hacerla.

De hecho, aseveró que en estos días "nos reuniremos con abogados para realizar una presentación legal, desde Eco-Sitio, responsabilizando por peligros futuros a quienes voten esta iniciativa".

Reconoció que la concejala ha realizado distintas participaciones en pos de causas ecológicas y aunque "la causa de este proyecto es evitar que se sigan tirando pilas al vertedero, se provocará un daño mayor", sentenció.

Entiende que es preferible desecharlas en ese lugar antes que colocarlas en las calles: "No conozco ningún asfalto que se rompa, con las altas temperaturas y la humedad van a saltar contaminantes. De última, el vertedero no está tan en contacto con las personas".

Pero quiso dejar en claro, para evitar una nueva polémica, que "el único método que funciona por el momento es tratarlo como un residuo peligroso. Es decir, enterrarlo en celdas de confinamiento, que son depósitos subterráneos que realizan empresas especializadas. Ello está aprobado por la Ley Nº 24.051 y en Córdoba se encarga la empresa TAYM".