Esta semana Joaquín Chanquía podría comenzar a asistir a la Escuela José Ingenieros.

Hace ya varios meses la madre del niño luchaba por conseguir un centro educativo que reciba a su hijo, quien padece una discapacidad a raíz de una parálisis cerebral.

El lunes sus padres esperaban que fuera incorporado en alguna institución para realizar al menos el segundo semestre del año, pero no fue así.

Marisa Carrillo comentó a EL DIARIO que “la inspectora Garrido quedó en que iba a llamarme para saber si el Ministerio de Educación confirmaba el ingreso en una escuela común y en las primeras horas de ayer dieron la aceptación”.

Ella relató que como hasta el lunes, día en que se retoman las clases luego del receso de invierno, no se habían comunicado, habían perdido las expectativas de que el niño comience la segunda parte del ciclo lectivo.

Las trabas burocráticas eran  “siempre muy sutiles, desde marzo que empecé a buscar una escuela para Joaquín, cuando me dieron todos los informes de que es apto”, ahondó Marisa.

Y continuó comentando que “desde ese momento recorrí siete colegios, que dijeron que no tenían lugar y cuando salió la nota en EL DIARIO, me dieron la confirmación de que había lugar en dos”.

Vale recordar que Héctor Godoy, director de la Escuela José Ingenieros, dijo a este medio que tenía disponibilidad para recibirlo, incluso que ya contaban con la adaptación edilicia para que pudiera trasladarse con su silla de ruedas.

Ahora fue la directora del jardín maternal de dicha institución, María Rosa Aguiar, la que dio el aval.

De todos modos, Carrillo hizo otra observación al respecto: “Esas dos escuelas que aparecieron son públicas y cuando me reuní con ellos, me pidieron que realice de nuevo los informes, pero en instituciones públicas, ya que los que teníamos son de profesionales que atienden en centros privados, donde él se trata”.

La Escuela Especial Nº 20, que es pública, evaluó el informe y lo envió al Ministerio de Educación nuevamente para que los avale.

Las demoras en la resolución del ente provincial se debieron a que “con Joaquín harían una excepción porque tiene 6 años y tiene que entrar en primer grado, pero él irá a jardín de infantes”.

Uno de los modos en que el niño manifestaba su angustia por no interactuar con otros chicos es por convulsiones. La madre contó que después de un evento durante el fin de semana donde compartió tiempo con niños, tuvo un brote epiléptico “demostrando la tristeza de volver al encierro de su casa”.

Joaquín ha comenzado a presentar episodios convulsivos, pero según le explicó el neurólogo a la mamá es normal porque está desarrollándose a nivel hormonal.

Por otra parte, él concurre a El Principito, “donde lo reciben muy bien, pero no es lo que necesita. Ahí tiene contención terapéutica, le ofrecen salud, y yo lo que quiero es educación, integración con chicos comunes”, concluyó Carrillo.

 

Los planes de la fundación

 

Joaquín Chanquía nació de manera prematura a 32 semanas de gestación y sufrió un severo cuadro de asfixia que motivó una parálisis cerebral.

Ello le provocó profundas secuelas, hoy está imposibilitado de cualquier acción motriz solo y sólo puede trasladarse en una silla de ruedas postural o en brazos de sus padres y ayudantes terapéuticos. 

A partir de allí, los padres de Joaquín crearon una fundación donde organizan eventos para recaudar fondos para los viajes que realizan a China, donde le hacen un tratamiento con células madre.

Además, Marisa, quien ha quedado sola en la fundación, dio a conocer que “gracias a Facebook, logramos  conseguir tres sillas que entregamos a chicos carenciados, cuyas familias no tienen obra social o dinero para contratar un abogado y presentar recursos de amparo”.

También donaron una silla a Santiago del Estero para un niño con parálisis cerebral, hijo de una madre soltera que lo lleva alzando. 

Otra actividad planificada es “hacer una estadística en Villa María sobre la discapacidad en la pobreza. Quienes quieran colaborar, sobre todo especialistas en estadísticas, están invitados, porque quiero presentarlas en la Comisión Nacional para la Integración de las Personas con Discapacidad (Conadis) y buscar ayuda para que tengan tratamientos terapéuticos con profesionales”, cerró Marisa.